Título: Florencia, esplendor y declive de la casa de Medici
Autor: Christopher Hibbert
Editorial: Almed
392 páginas
28 euros
Hicieron de Florencia un centro de poder europeo e iluminaron el mundo impulsando el Renacimiento italiano. Luego lo perdieron todo.
Los Medici, la familia de banqueros florentinos más rica, ambiciosa y con mayor poder de la Historia, mecenas de artistas y científicos de la talla de Leonardo de Vinci, Miguel Ángel, Botticelli, y Galileo, ejercieron ininterrumpidamente su influencia sobre gobernantes, nobles, soldados, arquitectos y papas durante más de trescientos años.
Su poder, que fue la fuerza impulsora del Renacimiento italiano, perpetuó un legado de autocomplacencia, conspiraciones, asesinatos y aventuras sexuales que finalmente los condujo a su propia destrucción como linaje.
Con su innegable maestría, Christopher Hibbert nos sumerge en las apasionantes vidas de los miembros de esta familia: el astuto Cosimo El Viejo, el increíble Lorenzo El Magnífico, el miserable Giulio, o los decadentes Grandes Duques. Con más de sesenta ilustraciones, mapas y notas sobre las obras de arte y los edificios que promovió la familia, Florencia, esplendor y declive de la Casa de Medici es un libro apasionante sobre una desaparecida dinastía cuya fama perdurará para siempre.
“Una obra excelente y de amena lectura”.
The Spectator
“Christopher Hibbert es un escritor más que bueno, extraordinario”
Anatole Broyard, The New York Times
Christopher Hibbert (Leicesterchire, 1924)
Estudió en el Radle y el Oriel Collage de Oxford. Durante la I Guerra Mundial sirvió en la infantería británica, siendo herido has en dos ocasiones.
En 1945, fue condecorado con la Cruz Militar.
Calificado por el New Statesman como “la perla de los biógrafos”, Hibbert, cuyo trabajo refleja una meticulosa erudición, se ha situado a la cabeza de los historiadores populares. Su producción incluye más de veinticinco títulos entre libros de Historia y biografías.
Artículo publicado en El Ideal
Los Medici de Dios…
Jorge CabrerizoNO tengo ánimos de correveidile de libros ajenos, pero cuando algo gusta está bien elogiarlo, igual que cuando hay que tirar de las orejas y se tira. Y si se trata, como en este caso, de un producto de la tierra -de ésta de Granada que da espárragos bien hermosos y libros como soles de bonicos- pues no escuece el piropo público, oiga. Editorial Almed bien-publica un libraco maravilloso intitulado ‘Florencia: Esplendor y Declive de la Casa de Medici’, de Christopher Hibbert (Medici, sí señora, nada de Médicis, ni Médici…, sin acento, sin españolizarlo, seamos serios: Medici aquí y en la China Popular), y yo, que hoy me ha dado la vena Dragó (‘unaynomássantotomás’), no puedo ocultar mi admiración y el deleite que me ha producido su lectura. Así que: ‘chapeau’, editorial granadina Almed, por este libro sobre Florencia y sus más distinguidos ciudadanos. Y es que ahora que acabamos de pasar las duras y las maduras de unas elecciones, ahora que siguen tirándose de las greñas aquellos ‘primarios’ de EE UU, ahora que colean -a bandazos ya, eh- los asuntos Iglesia-Estado, y ahora que se nos ha muerto Charlton Heston, que fue un Miguel Ángel Buonarroti la mar de creíble en una superproducción de cartón piedra y technicolor, ahora, digo, es el momento de leerse un libro como éste y de quedarse tan pancho, tan tranquilo, tan salomónico (‘nada nuevo bajo el sol’, decía su bíblica majestad). En España, por desgracia, no se suele escribir divulgación histórica con el desparpajo, la precisión en la imagen -cinematográfica- y la muy rigurosa calidad de investigación con que lo hace Hibbert.
Ríanse ustedes de Zapatero y Rajoy -castas enfrentadas-, de las puñaladas de Esperanza y Gallardón -hijos de un mismo padre, cainazos-, desterníllense al pensar en Rouco Varela-Savonarola y María Teresa Fernández de la Vega. Donde esté una buena conspiración del Papa de Roma y la familia Pazzi para derrocar a los Medici del ‘omnívoro’ poder, que se quite cualquier tontuna.
Abres el libro y te encuentras en tus manos con una novela negra, una de mafiosos, y al mismo tiempo con un escrupuloso libro de Historia en el que hacen su aparición estelar Miguel Ángel -en mayo de este año celebraremos el quinto centenario del más significativo encaramamiento a un andamio de todos los tiempos: Miguel Ángel al techo de la Sixtina-; Leonardo descodificado; el bueno de Fra Angélico, que era un bendito; el putero -está en el diccionario de la RAE, no se me sulfuren- de Fra Filippo Lippi; Donatello y punto; el fanfarrón de Verrocchio…, total, que para los amantes del Arte este libro se convierte en un desfile vivísimo de primeras figuras, que las palpas, que las tocas, tan nítidamente presentadas quedan en estas páginas. Y flipen -de flipar: estar o quedar entusiasmado- con el ‘Sacco di Roma’, donde te introduce de lleno el bestia de Hibbert, que te salpica la sangre y todo, y te codeas con el malandrín de Benvenuto Cellini (el que hacía saleros), el Errol Flynn del Vaticano, que se despachaba a cañonazo limpio desde la fortaleza de Sant’ Angelo, desbaratando alemanes bien comidos y bien hermosos, osos recios al servicio de Carlos V.
Y si no lo flipan con esto, paséense por el capítulo en el que Su Santidad Julio II toma el sitio de Mirandola al grito de «¿Vamos a ver quién tiene más cojones, si el rey de Francia o yo!»: cota de malla, espadón en ristre, mandoblazo va mandoblazo viene, escalando las murallas de la ciudad y todo el Santo Padre. O los capítulos dedicados a Savonarola -en el fondo un pobre hombre- y su intento de imponer un Estado Teocrático, o el que describe a las mil maravillas la conjura de los Pazzi -el mejor cine que jamás haya leído yo, fíjense-, o la decadencia dieciochesca final, almizclada con quiero y no puedo, jueguecitos del ‘Mujercitas’ de Louisa May Alcott pero protagonizados por el Gran Duque y un puñado selecto de tíos como castillos que tenía a su servicio como pajes. Y a todo esto…, ¿y los Medici? ¿Ah, los Medici…: ellos son los que tañen las cuerdas del laúd en que Christopher Hibbert transforma Florencia! ¿Música celestial para quien guste de la Historia y, cómo no, de las historias!
Pasen y vean, el gran circo de los Medici, la familia italiana más famosa de todos los tiempos -con permiso de la otra ‘familia’, la de Mario Puzo, primos hermanos al fin y al cabo de esta caterva que aquí se despliega-. Es toda una experiencia, de verdad. Yo me he divertido con este libro como un niño en feria.
Qué bonita es Florencia… Siempre he creído que tiene un cierto espíritu hermano de nuestra Granada. Visiten Florencia de la mano de este libro de Hibbert, no les defraudará. Y podrán comentarle ufanamente a algún amigo, como ahora estoy haciendo yo con ustedes, una vez de vuelta a la realidad más prosaica aunque menos infartada, que, como en los souvenir, «estuve en la Florencia de los Medici y me acordé de ti».
El esplendor y el declive de la Casa de los Medici, en un nuevo título de Almed
«Florencia. Esplendor y declive de la Casa de Medici» es el nuevo título de la editorial granadina Almed que acaba de ver la luz en su serie dedicada a grandes ciudades del mundo. El estudio, del que es autor el historiador inglés Christopher Hibbert, aparece así publicado por vez primera en español en una traducción de Fernando Miranda en la que se sumerge al lector en los entresijos de esta famosa y, antaño, poderosa dinastía de banqueros y mecenas florentinos.
Con más de sesenta ilustraciones, mapas y notas sobre las obras de arte y los edificios que promovió esta familia, el libro se presenta con una cuidada edición, al igual que otros títulos que le preceden como «Constantinopla: La ciudad deseada por el mundo», de Philip Mansel, o «El Cairo: La ciudad victoriosa», de Max Rodenbeck. Y es que todas estas publicaciones se alimentan del espíritu que ha querido imprimirles su editor, Jerónimo Páez, cuyo propósito no es otro que conformar una colección «que se mantenga en el tiempo». En este sentido, la historia de ciudades que han tenido y siguen teniendo protagonismo en el marco internacional constituye un foco de atención primordial para este editor, que dice estar siempre atento a la aparición de títulos narrados con rigor y amenidad. «El desarrollo intelectual, el pensamiento o el humanismo requerían un marco urbano; la civilización se hizo en las ciudades», argumenta Páez para avalar su apuesta por esta línea editorial en la que también se incluyen obras literarias sobre Tánger o Estambul así como guías de próxima publicación como las dedicadas a Edimburgo, Praga, San Petersburgo o a la Alejandría de E. M. Forster.
Biografías
Pero no sólo de historia de ciudades se nutre Almed. Los países ribereños del Mediterráneo y el estudio de las relaciones sociopolíticas entre los mismos, y la vertiente histórica vinculada con figuras de renombre universal también forman parte del ámbito de actuación de esta editorial granadina. Winston Churchill, Federico II, Jane Digby y Sir Richard Burton son algunos de los personajes que en breves fechas protagonizarán algunas de las biografías de este sello editorial, que tiene en cartera además las obras completas de Rafael Guillén.
