No creo que sea una persona extravagante ni radical pero digo lo que va a pasar y eso molesta mucho
En el preciso instante en que dejó de dar clases, «porque la autoridad decidió que no lo sabía hacer», se encontró un vacío que le empujó a escribir estas «150.000 palabras sinceras» de sus Memorias y desahogos (Ediciones Infova). El modo en que condicionó su vida la muerte de su primera novia, el periplo por medios de comunicación que le censuraron y el proceso que le llevó desde la izquierda a la derecha se recogen en este libro.
Con los años, una de las conclusiones amargas a las que ha llegado es haber padecido más censura durante la democracia que en tiempos de dictadura.
«No creo que sea una persona extravagante ni radical pero digo lo que va a pasar y eso molesta mucho. Dije, por ejemplo, que con la llamada ley sobre violencia de género esa violencia aumentaría… ¡La que cayó encima! Y nadie vino a pedirme perdón cuando se demostró que así fue».
—AUDIO DE LA ENTREVISTA COMPLETA—
Como analista de la realidad, Amando de Miguel siempre ha dicho que si Mariano Rajoy quiere llegar a mandar tiene que someterse a una entrevista en El País. Y tras la entrevista que el líder popular concedió al diario de Prisa el silogismo es muy sencillo.
«No porque PRISA sea el poder sino por ser parte del ‘Establishment’. El ‘Establecimiento’ es la influencia de empresas y personas que están por encima del poder y el poder tiene que estar acuerdo con aquello. Por ejemplo, Vargas Llosa nunca hubiera ganado el Premio Nobel si no hubiera escrito en El País. Y no tiene nada que ver con ser izquierdas o de derechas»
En una ocasión el periodista Graciano Palomo le preguntó por qué si no somos ricos, somos de derechas. Es una cuestión que nunca ha podido contestar del todo. Lo que sí tiene claro el sociólogo Amando de Miguel es que
«Para mi ser de derechas es una maduración. Hay gente que no madura y eso le lleva a ser de izquierdas toda la vida.»
