El Empire State demostró que el mundo se quería mover. Levantaron el edificio más alto del mundo durante 40 años
La construcción del Empire State entre 1929 y 1931, un símbolo de superación en medio de la peor crisis económica conocida hasta la fecha, es la carta de presentación del nuevo libro de David Zurdo y Ángel Gutiérrez, El techo del mundo (Plaza y Janés). Pero la novela es sobre todo la historia de la generación de estadounidenses que siendo niños en la década de los años 10 lucha en la I Guerra Mundial y sale adelante tras el desplome financiero más feroz.
En esta entrevista en Periodista Digital, David Zurdo cuenta que
«Cuando se empezaba a edificar el Empire State la crisis del 29 ya había estallado y se pudo haber abandonado el proyecto o reducir sus dimensiones. Pero los industriales que lo construyeron, aun sabiendo que perderían dinero, quisieron que ese símbolo existiera. (…) El Empire State demostró que el mundo se quería mover y levantar el edificio más alto del mundo durante 40 años.»
Entre aquella crisis y la actual, David Zurzo establece que
«La diferencia es que a principios del siglo XX la gente luchaban por vivir un poco mejor bajo el ideal del esfuerzo no del resultado. Hay que hacer un esfuerzo para conseguir las cosas. Ese concepto lo hemos perdido. Puede resultar algo muy trillado pero el esfuerzo tiene tanto valor como conseguir las cosas.»
«No se puede generar dinero de la nada pero eso es algo que los sistemas financieros actuales permiten. Lo permiten hasta que la burbuja explota.»