Es incomprensible que Borrell se haya echado esa novia, pero en fin...
«Zapatero ha sido una plaga para el PSOE y no sé si saldremos, si esa plaga nos ha matado».
Así de contundente se muestra Joaquín Leguina, ex presidente socialista de la Comunidad de Madrid entre 1983 y 1995, que acaba de publicar un libro, ‘Camino de vuelta’, en el que cuenta lo ocurrido en su partido desde la Transición hasta el triunfo del PP de José María Aznar en 1996.
Joaquín Leguina, que sigue afiliado al PSOE y pagando la cuota, asegura que nunca habría votado a Zapatero porque era «un hombre sin pasado».
«No es que sea un forofo de José Bono, pero es mucho más seguro para el partido. No sé para que serviría Zapatero, pero desde luego para jefe de personal de una empresa yo no le ficharía. ¿Cómo puedes elegir tan mal a tus colaboradores?».
Y es que para Leguina, el ex presidente eligió a su equipo en función,»no de la confianza que le daban las personas, sino de su capacidad de darle botafumeiro».
«Lo que hizo Zapatero respecto a la selección de personal fue una lucha sin cuartel contra el mérito y la capacidad. Y la ganó», añade el político cántabro en una entrevista en el ‘Magazine’ de ‘El Mundo’.
«ME ENCANTA EL OJO QUE LE HAN SACADO A CHACÓN»
Pero si a alguien tiene manía Leguina, como él mismo reconoce, es a Carme Chacón y a su marido, Miguel Barroso.
«Decía Ghandi, con bastante sentido común, que si utilizamos todos el ojo por ojo nos vamos a quedar ciegos, pero a mí me encanta el ojo que le han sacado a Carme Chacón [en el Congreso del PSOE en que Rubalcaba fue elegido secretario general]. A ella y a su marido les tengo una manía… Pero muy fundada, ¿eh? Han hecho mucho daño».
A Miguel Barroso le califica como «el que dirige el cotarro, el inventor de La Sexta, el conspirador».
«Ese Miguel, Miguel Barroso, y el otro Miguel, Miguel Sebastián, han movido toda clase de catástrofes en la era Zapatero: crear un grupo mediático para hacer negocio uno, y querer meterse en el BBVA el otro».
Los ‘dardos‘ de Leguina también van dirigidos a Cristina Narbona, ex ministra de Medio Ambiente e integrante del equipo de campaña electoral de Rubalcaba:
«Es una persona que no me merece ningún crédito personal. Es incomprensible que Borrell se haya echado esa novia, pero en fin… Sí, dirigió el programa electoral de Rubalcaba e inmediatamente después de las elecciones, se convoca el congreso y se pasa al enemigo, pensando que la otra es el futuro. Y se pega la hostia…».
«MIQUEL ICETA ES UN HIJO DE PUTA»
Joaquín Leguina también se refiere a la relación personal entre Felipe González y Alfonso Guerra. Según él, no eran amigos, sino «un matrimonio de conveniencia política, no de amistad, no de cariño».
«Guerra es más cariñoso con sus amigos. González es un hombre bastante frío».
Afirma que no mantiene apenas contacto con ninguno de ellos.
El ex presidente de la Comunidad de Madrid también relata lo ocurrido en el año 1998, en las primarias para elegir candidato a la alcaldía de Madrid, en las que perdió frente a Fernando Morán.
«Había una encuesta según la cual yo estaba bastante bien colocado frente a Álvarez del Manzano. En seguida se presentó un contrincante, Morán. Si le hubieran dicho que había elecciones para ser Kim de la India, se habría presentado igual. Pero el empujón final me lo dio Miquel Iceta. Le dijo a aquellos sinvergüenzas de Renovadores por la Base, que en principio estaban conmigo, que a Borrell no le interesaba que yo fuera alcalde de Madrid, que bastante tenía ya con aguantar a Maragall en Barcelona».
«Iceta es un hijo de puta, y no me importa decirlo en público. Un incapaz. Otro de los que no ha trabajado en su vida. Y yo no sé si hablaba en nombre de Borrell o de motu propio. Me desalojaron y llegaron las elecciones municipales, que Morán perdió ampliamente. Pero me alegro de que me hicieran esa putada. Me sentó como una patada, pero quizás me hicieron un favor. Narbona fue la jefa de campaña de Morán y se quedó de concejala, repartiéndose la miseria».