La literatura proporciona uno de los mayores goces de la vida. Estético, pero sobre todo espiritual. Es cuando hace ver o pensar en lo más sublime cuando se experimenta esa sensación de alegría intensa, de gratitud hacia lo leído. Y uno de los mayores espectáculos a los que se puede asistir es ver a un ser humano al rescate de otro. Y ese el caso de este libro tan oportuno en el que se trata de limpiar, con éxito en mi opinión, la imagen tan vilipendiada a través de los siglos de una mujer que no merecía eso ni mucho menos.
No era una tarea fácil, ni tampoco exenta de riesgos. Es tanta la basura vertida sobre la figura de Lucrecia Borgia que el riesgo de que venga luego alguien a enmendar la plana es muy grande. La única posibilidad de hacer frente al empeño consiste en llevar a cabo una tarea ciclópea, la de leer todo lo escrito sobre ella, hurgar en las fuentes disponibles, consultar a los entendidos en la materia, o sea, a quienes previamente habían hecho investigaciones. Se puede entender que puesto que fue una figura tan importante en su tiempo, lo escrito sobre ella es mucho.
<p»>Luego viene la segunda parte del caso, lo más brillante del asunto a mi entender. Desbrozado todo el camino anterior, separado el grano de la paja, quedaba la tarea de dar a conocer la conclusión. Y es tal la sensibilidad con la que Isabel Barceló se introduce en la mente de Lucrecia Borgia, el grado de identificación que demuestra, cómo llega a entender los valores cristianos que latían en el corazón de la duquesa que necesariamente tiene que producir una intensa emoción en los corazones sensibles.
No es lo mismo llenar de alabanzas a alguien que previamente ha sido muy alabado, que hacerlo con quien ha sido denigrado de forma injusta. La injusticia es el mayor mal que hay sobre la tierra, y luchar contra ella, hacer resplandecer la verdad, es lo mejor que puede hacer un ser humano.
Ficha técnica
Título: Lucrecia Borgia. Bajo una nueva luz
Autor: Isabel Barceló Chico
Editorial: Sargantana
456 páginas