Ahora que los más destacados directivos de la Sociedad General de Autores y Editores están siendo investigados por la creación de una presunta trama de enriquecimiento ilícito, es momento de repasar los orígenes del escándalo y el funcionamiento interno, así como sus actuaciones hacia el conjunto de la sociedad, de la más poderosa de las entidades de derechos de autor. Con tal propósito han participado en la Tertulia de Periodista Digital el politólogo, traductor de documentales y socio de la SGAE Antonio Golmar, y el periodista Antonio José Chinchetru, redactor de Periodista Digital y experto en cuestiones de propiedad intelectual que lleva años escribiendo sobre la asociación de Teddy Bautista en diversos medios de comunicación.
Golmar recuerda que el origen de la actual actuación judicial se remonta a una denuncia de 2007, cuando estaban muy activas las protestas por el canon digital.
Tenemos que recordar todo el movimiento de oposición que hubo al canon, todo lo que se dijo entonces. Y muchas de las cosas que se dijeron entonces: «cuidado como se plantea el canon, y la gestión del canon, puede dar lugar a todo esto». Eso se dijo entones. «No, eso es resentimiento, eso es envidia, van contra nosotros…» Y, justo, lo que está pasando ahora mismo es lo que se estaba diciendo en esa época.
Chinchetru recuerda que desde 2007 hay una sentencia firme de 2007 que declara que la existencia de la Sociedad Digital de Autores y Editores de José Rodríguez Neri es contraria a la Ley de Propiedad Intelectual. Añade:
En la SGAE se agarran siempre a la Ley de Propiedad Intelectual, en una lectura todavíaa más favorecedora para ellos de lo que ya es de por sí la ley, y ellos mismos son los primeros que violan esa ley.
También se ha referido Golmar a la defensa de Teddy Bautista y la SGAE que han hecho Victor Manuel, Andrés Calamaro, Caco Senante o Alejandro Sanz:
El problema es que muchos de ellos son millonarios, viven aislados de la sociedad, viven en su burbuja. ¿Cuánta gente conocen que gane menos de 100.000 euros? Pues seguramente los empleados del servicio doméstico que tengan. No se dan cuenta del daño tremendo que están haciendo a todos los socios con ese tipo de declaraciones, y del daño que están haciendo a los trabajadores de la SGAE.
¿Qué quieren? ¿Declararle la guerra a toda España entera? Ellos pueden, a lo mejor, pero nosotros no podemos permitírnoslo.
Chinchetru añade a esto:
Como no sabemos cuanto recaudan, en el reparto sospechamos que hay personas que se llevan mucho más de lo que les corresponde. Pero aún así, es para decirle al señor Sanz: «Es que muchos de los fondos que estos se han llevado era dinero que le correspondía a usted». Señor Calamaro: «Es que estos señores, presuntamente, le han robado también a usted», Señor Caco Señante: «Presuntamente le han robado a usted». Y señores, si no les han robado, es que ustedes están metidos en el ajo. Y yo quiero pensar que al menos alguno de ellos no está metido en el ajo.
Surge la cuestión de hacia dónde puede conducir la situación actual:
Creo que la SGAE se va a enrocar. Va a hacer una defensa numantina, el «si me quieren quitar el chiringuito, que me arrastren, y antes de arrastrarme lo quemo. Creo que eso va a ser lo primero que ocurra. Y a partir de ese momento sí que puede haber gente que diga «hasta aquí hemos llegado. Esto hay que cambiarlo porque esta táctica es suicida, porque mañana los políticos que nos han apoyado pueden hacer justo lo contrario».
Chinchetru comparte esta opinión y añade:
Otra cosa es como reaccionen los políticos. Aquí hay muchos políticos interesados en tapar esto. Lo que pasa es que ya ha explotado y no sabemos en qué va a derivar. Lo que no sabemos es lo que puede ocurrir después con todas las demás entidades de gestión. Porque yo no digo que sean todas iguales, pero el mismo tipo de comportamientos, no tan brutales pero sí en menor medida, ocurren en algunas de ellas. Al final cuando tu tienes que manejar dinero que no es tuyo, porque al final es eso, la tentación existe.
Al final esto puede realmente ser un punto de inflexión en cómo entendemos la propiedad intelectual, la gestión de la propiedad intelectual en España. Y, cuidado, que puede llegar a repercutir en el resto de Europa. En una reunión de las entidades de gestión de toda Europa, todas dijeron «la SGAE es nuestro modelo».