"Todos en EEUU malentendieron 'Born in the USA', hasta Ronald Reagan que le utilizó para su campaña"
Desde su infancia humilde con un padre alcohólico que pagaba con él su frustración, pasando por la traición de su mánager Mike Apple o el rechazo que provocó entre algunos de sus fans su apoyo a Barack Obama, sin olvidar la intrahistoria que originaron muchas de sus canciones. Magela Ronda, editora y periodista catalana, desvela en ‘Bruce Springsteen. De Greetings from Asbury Park a la tierra prometida’ (Ed. Grijalbo) los aspectos más desconocidos de uno de los iconos musicales más influyentes de la historia del rock. Periodista Digital ha charlado con Ronda, entre concierto y concierto de ‘The Boss’ por Europa, sobre este trabajo prologado por el presentador Manel Fuentes y que a buen seguro hará las delicias de los fans del rockero de Nueva Jersey.
¿Qué le motivó a escribir este libro?
Quería reflejar la pasión que sentimos los fans por Bruce y como mi trabajo son los libros, edito libros infantiles, entonces creí que era la mejor manera de homenajearle. Está hecho en comunidad. Más de 35 expertos cercanos a Bruce han participado.
De Springsteen se conoce sobre todo su faceta de rockero triunfador, un ídolo que llena estadios con sus shows, pero creo que sus inicios en la música no fueron nada sencillos…
No, para nada. Nació en una familia muy humilde. El padre estuvo mucho tiempo desempleado, era alcohólico y pagaba su frustración con él y la madre, sin embargo, siempre le apoyó. Hubo momentos de su vida que no tenía un techo donde dormir. A veces lo hacía en la tienda de amigos o en la playa incluso cuando no era verano.
Sus primeros discos tuvieron una notable repercusión entre la crítica pero no se vendieron mucho ¿Es verdad que la discográfica le dió un ultimatum a Bruce para su tercer disco (‘Born to run’)?
Sí, con ‘Greetings from Asbury Park’ y ‘The Wild, the Innocent & the E Street Shuffle’ le intentaron vender como el nuevo Bob Dylan y no obtuvo el éxito que esperaba la discográfica. Hubo incertidumbre, dudas…hasta que llegó ‘Born to run’. Un disco que trajo de cabeza a Bruce, porque fue muy perfeccionista en la grabación, pero que le catapultó al éxito.
Tras ese golpe de autoridad, cuentas en el libro que años más tarde se enemistó con su manager Mike Apple…
El gran problema es que Bruce había cedido involuntariamente los derechos de sus canciones a Apple y éste tenía la última palabra de todo lo que quisiese grabar Bruce. Y eso era imposible para Springsteen, estaba en contra de su naturaleza que le dijeran lo que había que hacer. Le defraudó. Un amigo le había traicionado, no había ido de buena fe. A Bruce le valía con un apretón de manos y Mike Apple no lo cumplió. Pero años más tarde arreglaron sus problemas y de hecho el concierto de 2009, en Baltimore se lo dedicó a Mike Apple.
«UNA VEZ LE PILLARON EN UN CLUB DE STRIPTEASE Y ÉL CONTESTÓ: ‘NO SOY BRUCE, EL VERDADERO ESTÁ EN CASA CON SU MUJER»
¿Es Springsteen un rockero al uso? Porque no se le conocen muchos escándalos…
No cumple con esa imagen de rockero maldito. De hecho él dice que con toda la energía que tiene dentro sólo le faltaba tomarse drogas. No tiene ningún escándalo gravísimo. Y si tiene alguno podría ser aquella vez que le pillaron un matrimonio de fans en el parking de un club de Striptease. Le dijeron: ‘Bruce, no deberías estar aquí’. Y Bruce que es muy cuentista les contestó: ‘No soy Bruce, soy uno de los muchos Bruce Springsteen que pululan por aquí y el verdadero Bruce está en casa con su mujer’.
También en otra ocasión le pillaron los paparazzis en un hotel de Italia en el balcón en calzoncillos con Patti, integrante de su banda que desde hace años ya es su mujer. Pero en aquel tiempo Bruce estaba ya casado, con Julianne Phillips y se montó algo de revuelo.
El ‘boom’ en su carrera fue ‘Born in the USA’, un disco que usted comenta en su libro que se malentendió…
Totalmente. Parece ser que nadie entendió la letra de ‘Born in the USA’, vieron la bandera americana en la portada del disco y asumieron directamente que era algo patriótico. Los mismos americanos no pillaron la letra, algo bastante tonto porque yo creo que está clarísima. Es una metáfora oculta, una crítica.
Ronald Reagan llegó a aprovecharse…
Sí, está claro que no escuchó el disco porque llegó a utilizar la canción como banda sonora de su campaña electoral, diciendo que todos los americanos tenían que ser como Springsteen y que representaba el sueño americano. La canción iba de todo lo contrario. Es un hombre que quiere a su país pero al mismo tiempo tiene capacidad crítica.
¿Le ha pasado factura su activismo político?
Sí, en América son más exagerados para todo. Le ha costado bastante caro. A sus fans no le gustó que tomarán partido de manera tan evidente en las campañas de Kerry y Obama, creían que le había traicionado. Le enviaban a su casa discos rotos, cartas amenazadoras. La analogía con el clan de la ceja aquí podría servir. Parece que nos moleste que tomen partido y de manera activa.
«EN EL CONCIERTO DE SEVILLA EN MEDIO DEL CONCIERTO DIJO A LA BANDA ‘THIS IS SPAIN’. TIENE UNA COMPLICIDAD ESPECIAL CON LOS ESPAÑOLES»
¿Cómo se puede permitir el gasto de ir a tantos conciertos?
A esta gira europea voy a ir a 17 conciertos. Ahorrando y haciendo sacrificios. No hemos tenido gira dos años así que en este tiempo todo lo que entraba lo metía en una huchita. No tengo vacaciones normales pero no me importa absolutamente nada. Prefiero irme de gira con Bruce que a una playa a tomar el sol. No supone una renuncia.
¿Por qué se dice que mantiene Springsteen una conexión especial con los españoles?
Porque a Bruce le gusta mucho la playa, el sol,de ahí que le caigan bien los españoles e italianos. En su primer concierto aquí, que fue en Barcelona en el año 1981, Bruce ya se quedó impresionado de la energía de la gente. Es más su biógrafo oficial, Dave Marsch, lo elegió en su libro como uno de sus favoritos. Siempre regala algo especial. Al empezar esta gira, en Sevilla, a la segunda o tercera canción se dio la vuelta y le dijo a su banda ‘This is Spain’, como diciendo ‘¿Véis la diferencia que hay con los americanos?’ Esa complicidad existe.
¿Hay rockero para rato?
Sí. Él siempre dice que no se jubilará, se irá retirando poco a poco. Tal y como lo conocemos queda Bruce unos cuantos años más. Quizá luego haga más un formato de show más intimista, como ‘Devils and Dust’, más acústico, más tranquilo. Pero este hombre no puede estar mucho tiempo sin subirse en el escenario. Con 62 años en los conciertos, con casi tres horas de show, había gente del público que no podía ya con su vida, y él seguía tocando. Eso es pasión y no se puede dejar.