La obra salesiana en República Dominicana es una luz que brilla con fuerza y que no se deja atenuar por los focos de las discotecas
Misiones Salesianas.- Dentro del caos que un país como República Dominicana vive, un caos donde los políticos han olvidado las necesidades de su pueblo en pos del beneficio propio conseguido mediante la satisfacción de inversores y turistas extranjeros, los niños son siempre los más damnificados, el eslabón más débil de una cadena fuertemente anclada a la sociedad del ocio sin preocupaciones.
Salvo en Don Bosco.
Gracias a la red Muchachos y Muchachas con Don Bosco y sus múltiples proyectos, miles de niños dominicanos despiertan cada día con la conciencia de que ellos tienen un futuro por delante. Quizá no les espere un barco donde poder disfrutar de todos los mojitos que deseen, ni siquiera esa vida libre de preocupaciones del turista que disfruta de su país. Pero saben que con la formación, tanto académica como en valores, que en los centros salesianos reciben se les abrirán las puertas de un futuro lejos de las calles, donde ellos podrán decidir su camino.
Para leer el artículo completo, pincha aquí: