Uno de los objetivos fundamentales es acercar a la sociedad española los rostros de «nuestros hermanos» del Sur
(Manos Unidas).-nLos participantes en el IX Foro de Manos Unidas, celebrado los días 23 y 24 de abril en el Centro Cultural Bancaja, de Valencia, han expresado su esperanza de que pueda ganarse la guerra al hambre y a la pobreza, y han subrayado la necesidad de asumir estilos de vida más austeros y de un consumo más responsable y menos agresivo con el medio ambiente.
El Foro ha estudiado la lucha contra el hambre desde el punto de vista de la defensa de la tierra, teniendo en cuenta las consecuencias que los cambios en las condiciones del clima tienen para los más pobres.
El documento final del encuentro fue leído por la Presidenta de Manos Unidas en Valencia, Isabel María Moleres. En él se afirma que erradicar el hambre «implica la promoción del desarrollo agrícola de los países más pobres y la defensa de sus pequeños agricultores, como garantías de la satisfacción real de sus necesidades básicas y de su autonomía».
La Tierra, dice el documento, dispone hoy de recursos suficientes para alimentar a todos, pero son necesarias políticas eficaces de distribución justa, que garanticen la disponibilidad de los alimentos y el acceso a ellos, la estabilidad de los suministros y la aceptación cultural de los mismos.
El texto fija su atención especialmente en las graves dificultades que atraviesan los agricultores de los países del sur y en la necesidad de apoyarles a través de proyectos de desarrollo sostenibles. «Defendemos el mundo rural como un estilo de vida propio lleno de valores y cultura, y apoyamos a los pequeños agricultores », afirma Manos Unidas.
Mundo rural y soberanía alimentaria
En la jornada del día 24, el Foro ha ofrecido un panel sobre el mundo rural y la soberanía alimentaria (en el mundo, 3.000 millones de personas viven en el campo), otro sobre pobrezas urbanas y una mesa redonda sobre la cooperación Norte-Sur. En ellas han intervenido representantes de Brasil, Mozambique, India, Colombia, Senegal y Camboya. Según se ha puesto de relieve en esta mesas, las pequeñas iniciativas de desarrollo construyen un mundo más justo mejor que los grandes organismos internacionales.
Agustín Domingo Moratalla, catedrático de Filosofía Moral y Política en la universidad de Valencia, ha pronunciado una conferencia sobre economía, ecología y ética, y ha puesto de relieve la importancia que tiene la espiritualidad en el trabajo en favor del desarrollo. « El mundo del desarrollo -ha dicho- no se puede entender sin las religiones ».
La Presidenta nacional de Manos Unidas, Myriam García Abrisqueta, ha dado las gracias a todos, y ha cerrado el Foro. Ha dicho que un trabajo fundamental de Manos Unidas cuando realiza actividades de sensibilización es acercar a la sociedad española los rostros de «nuestros hermanos» del Sur, y ha invitado a los miembros de Manos Unidas a poner a las personas en el centro de su atención cuando trabajan en favor desarrollo.



