Con un líder del panafricanismo tan estrambótico, excéntrico e impredecible, es difícil que a África se la tome en serio en muchos otros contextos
En Munyonyo, uno de los establecimientos turísticos más lujosos de Uganda a las orillas del Lago Victoria, se han reunido en estos días a 30 jefes de Estado y demás representantes de los 53 miembros de la Unión Africana en su 15ª cumbre ordinaria que ha concluido el día 28 de Julio. Lo curioso es que, leyendo los rotativos nacionales, uno no terminaba de ver anuncios de empresas y negocios que enviaban saludos de bienvenida y de prosperidad al «Hermano Coronel Muammar Gaddafi» que honraba al evento con su presencia.
Estos anuncios se han unido a las numerosas vallas publicitarias con el retrato del líder libio que se han instalado en los alrededores del lugar del evento daban la impresión de que, más que una cumbre, era un encuentro bilateral de la Unión Africana por un lado con el prócer mayor del panafricanismo por otro.
Para leer el artículo completo, pinche aquí