La conclusión de Rovirosa era que el castigo de Dios por cobrar este don de Dios que es el tiempo es que cada vez tenemos menos tiempo
Más información
(Hilari Raguer).- González Faus concluye su diatriba contra el capitalismo reprochando a la Iglesia, que tanto presume de magisterio moral, que no sepa decirnos nada sobre la inmoralidad de la usura. Me recuerda a Guillermo Rovirosa, el fundador de las HOAC, que lamentaba que los moralistas católicos, después de (fieles a la Biblia y a la tradición patrística más de mil años) condenar como pecado la usura, se hubieran reconciliado con el capitalismo naciente y transigieran hasta decir que sólo era pecado si el interés era muy elevado o las condiciones leoninas. Así es como ha pasado a los códigos penales modernos el delito de usura.
Para leer la noticia completa, pinche aquí