El vacío es necesidad para que acontezca la creación, la gracia, el don, la Encarnación y la Redención
(Ángel Moreno, de Buenafuente).- Hoy, Sábado Santo, es el único día del año que no hay acción litúrgica, salvo la Oración de las Horas. Los templos permanecen desnudos, apagados, como sin alma, para expresar el realismo de la muerte de Cristo y su sepultura.
No obstante al misterio que se cierne sobre el abismo que hay después de la muerte, sorprendentemente el vacío es necesidad para que acontezca la creación, la gracia, el don, la Encarnación y la Redención.
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