El movimiento religioso agrupado en la Asociación Internacional de Amigos de Prado Nuevo cuenta con mas de 100.000 socios y simpatizantes
La cita es entre semana, en un prado del municipio de El Escorial, en plena sierra de Madrid. Pese a ello, será multitudinaria. Miles de personas se desplazarán hasta alli para conmemorar el 30 aniversario de la primera manifestación de la Virgen a Luz Amparo Cuevas, una mujer sencilla que en esa época trabajaba como asistenta en el hogar de la familia Martínez Sotillo. Familias enteras de Madrid, de inumerables destinos de España y de un puñado de destinos europeos, acompañarán a la Virgen para darle gracias por curaciones o conversiones recibidas para ellos o para alguno de sus familiares.
Los frutos de Prado Nuevo son:
– La obra social
– Las distintas instituciones religiosas fundadas por Luz Amparo.
– El movimiento religioso agrupado en la Asociación Internacional de Amigos de Prado Nuevo, que cuenta con mas de 100.000 socios y simpatizantes.
APARICIONES DE EL ESCORIAL, TREINTA AÑOS DESPUÉS
Isidro-Juan Palacios
Este 14 de junio de 2011 se cumplen treinta años de un acontecimiento religioso que, a fuerza de tesón, paciencia y no pocas dificultades, ha entrado ya en la Historia. Qué duda cabe, nos estamos refiriendo a las apariciones marianas habidas en Prado Nuevo, un paraje todavía hoy natural y muy cercano al viejo pueblo de El Escorial, a cincuenta kilómetros de Madrid.
LAS TRES ETAPAS DE UNA VIDA DIFÍCIL
Desde sus inicios, estas apariciones iban a tener sin duda un desarrollo difícil, controvertido y no pocas veces dramático. Esto por varias razones. La primera, porque la propia esencia de su mensaje originario -la meditación de la pasión de Jesús, el fundador del cristianismo- no auguraba otra cosa distinta. La segunda, porque ninguna de las apariciones que han tenido lugar en el decurso de los siglos modernos han experimentado un nacimiento y un progreso apacibles en el seno de esta época de precaria espiritualidad. Y la tercera, porque, sencillamente y sin ánimo de subir el tono: «vivir es sufrir», siempre en su doble dimensión: o bien padeciendo el sufrimiento o bien provocándolo. Tal ha sido, pues, su signo y tal parece que así seguirá siendo, incluso después de su presumible y cada vez más cercano triunfo: el reconocimiento de estas apariciones de la Virgen por el orbe eclesiástico. Un camino, por consiguiente, lleno de espinas y amarguras, aunque su objeto haya sido y siga siendo haber nacido para hacer el bien a los hombres. Y para probarlo, baste con recordar aquí o describir de una forma sucinta su ya apretada, expresiva y pletórica cronología. Semejante descripción será más elocuente y útil para nuestros lectores que el relato habitual.
CRONOLOGÍA DE LAS APARICIONES DE EL ESCORIAL
14.6.1981.- Primera aparición en Prado Nuevo a Luz Amparo Cuevas, una humilde mujer. «Soy la Virgen Dolorosa -le dice-. Quiero que se construya en este lugar una capilla… Que se venga a meditar la pasión de mi Hijo… Esta agua curará… Muchos serán marcados con una cruz en la frente, Haced penitencia. Haced oración». Muy pronto, Amparo comienza a padecer los estigmas, con llagas visibles, de esa misma pasión.
7.11.1981.- Un testigo de excepción, el médico de San Lorenzo de El Escorial, Ricardo Ruiz Capillas, certifica una de aquellas estigmatizaciones: la apertura y cierre de las llagas, la inexplicable emergencia y reabsorción de la sangre, que manda analizar, confirmando su naturaleza humana.
26.5.1983.- Luz Amparo es agredida y vejada por tres encapuchados cuando rezaba sola en Prado Nuevo. Tiene que ser hospitalizada. El atentado queda impune.
24.6.1983.- En consonancia con el primero de los mensajes, la aparición manda fundar «casas de amor y misericordia» (Este mandato será crucial para sacar adelante el objeto de la aparición, facilitando su expansión, ya que de otro modo, al quedar ésta a merced del reconocimiento eclesiástico -presumiblemente lento y por ahora inseguro o incierto- la hubiera hecho languidecer o tal vez paralizado. Recordemos que a este respecto y hasta el día de hoy -verano de 2011, ¡treinta años ya!- la aparición stricto sensu no ha sido canónicamente admitida todavía por la jerarquía eclesiástica ordinaria).
Unos meses más tarde -dentro ya de 1984-, el cardenal-arzobispo de Madrid-Alcalá, Ángel Suquía Goicoechea, ruega a Luz Amparo que no haga declaraciones en los medios informativos y que se abstenga de frecuentar Prado Nuevo durante las grandes concentraciones de fieles que allí acuden a rezar y a ser testigos de los portentosos acontecimientos.
12.4.1985.- El Cardenal de Madrid publica una nota oficial en el Boletín de la Archidiócesis, pronunciándose sobre el supuesto «carácter sobrenatural… de las apariciones y revelaciones». Literalmente dice la nota: «no consta». Sin embargo, no se trata de una prohibición, ni tampoco de una censura, sino de una medida cautelar, «habitual en estos casos» -según palabras del propio Cardenal-. La aparición queda así, desde entonces, sometida a seguimiento y observación oficiales por parte de la jerarquía competente.
13.5.1988.- Queda constituida la Fundación Benéfica «Virgen de los Dolores», reconocida como entidad de interés general, sin ánimo de lucro y de carácter benéfico-asistencial por el Ministerio de Asuntos Sociales. Atender a las personas necesitadas, y en particular a las más desamparadas o abandonadas -con expresa fidelidad a la esencia del Evangelio-, es su fin principal.
4.7.1990.- El trazado, ya previsto desde hace años, de una nueva carretera, que parte en dos el lugar de las apariciones (Prado Nuevo), da lugar, o simplemente desencadena, una situación explosiva. Por un lado, el hecho da pie a la recalificación de terrenos, antes rústicos y ahora urbanizables, y, por el otro, ligado a este dato, posibilita el surgimiento de una triple alianza contra el hecho de El Escorial. Unen sus fuerzas entonces en una coyuntural alianza, aunque por distintos motivos, el alcalde socialista Mariano Rodríguez, el administrador de la finca, Tomás Leyún, y el párroco de la localidad, Pablo Camacho, todos ellos notoriamente celosos por el auge social y religioso que van tomando las apariciones y sus mensajes entre la multitud que acude de todas partes de España.
15.9.1992.- El Ayuntamiento de El Escorial hace público su nuevo plan urbanístico. Cuatro días después -el día diecinueve-, el Alcalde declara que no tolerará «ningún Lourdes ni Fátima en El Escorial.» Los virginianos -como así se les comienza a llamar a los seguidores de las apariciones- responden con la recogida de 120.000 firmas. Estalla el conflicto.
6.10.1992.- Quema frustrada del fresno de las apariciones.
14.5.1993.- El Cardenal de Madrid, Ángel Suquía, erige y aprueba canónicamente a la Asociación de Seglares Reparadoras Amor, Unión y Paz. Y antes de que termine el año -27 de diciembre- visita la sede virginiana de la Fundación «Virgen de los Dolores» celebrando en ella una misa, y respaldando a estos fieles con su presencia durante varias horas. Este acontecimiento eclesial es recibido por quienes vienen defendiendo las apariciones como una señal de alivio ante tanta incomprensible persecución.
3.2.1994.- Pese a las muchas adversidades, los fieles siguen acudiendo en masa a Prado Nuevo. Como respuesta ante ello, el Ayuntamiento prohíbe el acceso a las gentes y cierra la Pradera con una doble y elevada valla metálica, que vino a denominarse por la prensa de entonces «la valla de la vergüenza». El día 10 del mismo mes es retirada del árbol la hornacina con la imagen de la Virgen por la policía municipal, hecho que se repitió una docena de veces, al menos.
16.3.1994.- Las varias cercas metálicas (una de ellas -la exterior- será luego prohibida por contener alambre de espino) siguen clausurando el Prado. El 18, el pleno de la alcaldía declara a El Escorial ¡»Municipio de la Tolerancia»! En abril de1994, a instancias del párroco de El Escorial, según una declaración suya posterior, se crea la asociación Gesto por la Libertad, con la única intención de hostigar a los fieles de Prado Nuevo e impedir sus oraciones en las inmediaciones del término municipal. Un cambio radical se producirá al año siguiente con la caída de la triple alianza.
14.6.1994.- Coincidiendo con el XIII aniversario de la aparición, el cardenal-arzobispo de Madrid, Ángel Suquía, aprueba los estatutos de la Asociación Pública de Fieles «Reparadores de Nuestra Señora La Virgen de los Dolores» y ratifica los de la Fundación Pía Autónoma «Virgen de los Dolores», reconociendo en ambos documentos a Amparo como fundadora.
20.4.1995.- La caída de la triple alianza, contraria a las apariciones, confluye y se concreta del siguiente modo: Mariano Rodríguez, el alcalde, es retirado de las listas electorales por su partido debido a algunos incidentes violentos de carácter interno en los que el edil se ve inmerso muy a su pesar; el párroco, Pablo Camacho, es trasladado de la parroquia por motivos de una enfermedad grave, y el obispado le nombra sustituto el 31 de mayo; por último, fallece el administrador de la finca de Prado Nuevo, Tomás Leyún, el 17 de julio de 1995.
28.5.1995.- El nuevo candidato del partido socialista, Juan Manuel Aceña, pierde las elecciones municipales y, en consecuencia, la alcaldía. Gana los comicios el PP.
15.9.1995.- Reapertura de Prado Nuevo.
13.10.1996.- La Fundación «Virgen de los Dolores» inaugura la residencia de ancianos «Jesús del Buen Amor», en Griñón dentro de la provincia de Madrid («fundad casa de amor y misericordia», había dicho la aparición en uno de sus principales mensajes). Bendice la inauguración el obispo de Getafe, Francisco José Pérez y Fernández-Golfín, al año siguiente (16.2.1997).
8.11.1996.- El nuevo cardenal de Madrid, Antonio María Rouco Varela, que ha sucedido a su antecesor (Ángel Suquía), nombra capellán de la Asociación Pública de Fieles «Reparadores Virgen de los Dolores» al padre José María Ruiz. El padre Julián Paulino, como segundo capellán, será nombrado por la misma autoridad eclesiástica el 30 de octubre de 2001.
20.11. 1996.- Se produce la conversión pública del antiguo párroco de El Escorial, Pablo Camacho, reconociendo su papel instigador en todos los acontecimientos anteriores en los que ha participado la alcaldía y la asociación Gesto por la Libertad. Esto ante numerosos testigos que le visitaron durante su enfermedad.
26.5.1997.- Los virginianos compran Prado Nuevo a sus legítimos propietarios, justo catorce años después del primer atentado sufrido en la Pradera de las apariciones por Luz Amparo.
4.5.2002.- La Aparición anuncia el fin de sus mensajes públicos en Prado Nuevo. Veinte años de locuciones públicas terminan. Han sido más de trescientos. Su esencia: ¡el Amor! «Por Dios, ¡haced oración, haced penitencia, entregaos y servid a los demás!» Eso era todo, en resumen.
14.9.2003.- En Torralba del Moral, provincia de Soria, es inaugurada la residencia de ancianos Nuestra Señora de la Luz y bendecida por el obispo de Osma-Soria, Francisco Pérez González.
14.6.2006.- Para conmemorar el XXV aniversario de la aparición de la Virgen a Luz Amparo, el Cardenal de Madrid autoriza la celebración de una primera misa en las inmediaciones de Prado Nuevo. A ésta le seguirán otras dos más en 2007 y 2008.
1.10.2006.- Autorizada por el actual Cardenal Arzobispo de Madrid, comienza a funcionar en El Escorial la Casa de Formación-Seminario para sacerdotes y seminaristas de la Obra de la Virgen de esta aparición.
7.2.2009.- Antonio María Rouco Varela, máxima autoridad eclesiástica en la región, autoriza a partir de ese día la celebración de una misa cada primer sábado de mes en las cercanías del lugar de las apariciones en Prado Nuevo. Acuden miles de personas. «Al año siguiente, febrero de 2010, el Cardenal Rouco permite, sin ninguna traba, que sacerdotes y religiosos-as acudan al lugar de la aparición, para acompañar a los peregrinos a los actos piadosos. La Nota de 1985 del anterior Cardenal queda así prácticamente derogada».
14.6.2011.- Las cosas, hasta hoy, han seguido poco a poco adelante. Nuevas vocaciones sacerdotales, la fidelidad de los peregrinos, los encomiables ejemplos de permanencia sin faltar a la cita mes tras mes de los portugueses y franceses, que acuden a recibir la bendición de la Virgen… ha sido, en su conjunto, la marca indeleble de los últimos años de este brote religioso de El Escorial. Un brote religioso, que, como hemos apuntado al principio y pese a la mejor bonaza de los últimos años, no ha dejado de acusar los sinsabores de la contradicción.
Porque suscitando toda suerte de comentarios a favor o en contra, dentro y fuera de la Iglesia, la polémica y el litigio le han acompañado siempre, aunque también las favorables comprensiones, como apuntamos. De éstas hemos dejado alguna muestra, no de todas, claro; y de aquéllas también, aunque tampoco en su totalidad. A este respecto, hemos soslayado a propósito las incidencias privadas que, sin embargo, han tenido gran relieve en los medios informativos.
Nos referimos, como no, a las discusiones motivadas por el paso -libre y voluntario- dado por algunos miembros de las comunidades de Prado Nuevo (Hermanas Reparadoras, Comunidad Familiar o Comunidad Vocacional), cuya decisión de desprendimiento y de entregarse, gratis et amore, al servicio de los demás no ha sido siempre bien comprendida. Algunas de estas discusiones, algunos de estos ataques y censuras han ido y venido de la televisión, la radio y los periódicos a los juzgados, y viceversa.
De todos ellos -subrayamos, casos estrictamente privados o personales en los que no deberíamos entrar- la defensa de las comunidades de El Escorial -justo es reconocerlo- ha salido siempre bien parada, incluso cuando la crítica o la ofuscación eran más recias. Sea como fuere, la verdad se ha ido abriendo camino y ha ido dejando un trazado firme sobre el sendero.
Sabido es que después de la tempestad viene siempre la calma. Y así será.
Isidro-Juan Palacios