Ni el sacerdote inhabilitado ni ningún sustituto se acercaron por las parroquias
Las cuatro parroquias del Concello de Piñor, en las que ejercía como párroco Antonio Fernández Blanco, el sacerdote inhabilitado por el Obispado de Ourense por ir en una lista electoral, volvieron a vivir su segundo domingo consecutivo sin oficios religiosos.
Algunos vecinos volvieron a apostarse ante la iglesia de Carballeda, una de las cuatro en las que oficiaba el sacerdote, para esperar el posible regreso de su expárroco, o bien para irse en el caso de que les fuera enviado , como ocurrió el pasado domingo, otro sacerdote que no fuera Antonio Fernández.
Finalmente solo un par de cámaras de televisión acudieron a la fallida cita, pues ni el antiguo párroco inhabilitado, que ha renunciado ya a su acta de concejal para que el Obispado le levante la prohibición de ejercer el ministerio sacerdotal, ni ningún cura suplente acudieron a oficiar misa. El Obispado sigue manteniendo total mutismo sobre el futuro de Antonio Fernández, cuyo regreso exigen estos vecinos de Piñor salvo amenaza «de no volver jamás a misa».
(Rd/Agencias)