Se ha prestado "poca atención" a las "raíces antropológicas" y "éticas" de la crisis económica
En la homilía de la misa mayor de la festividad de la Virgen de la Asunción, celebrada en la Basílica de Begoña, el obispo de Bilbao, Mario Iceta, ha opinado que la realidad ante la que se enfrentan los jóvenes en la actualidad es «ilusionante y esperanzadora», pero sobre la que se ciernen sombras. Así, ha considerado que la Iglesia debe reflexionar sobre varios asuntos, como la pobreza en Somalia, la violencia en Siria o los problemas en Inglaterra o Noruega. También ha pedido una reflexión «profunda» para salir de la crisis.
Iceta se ha referido a la crisis económica actual y a la situación de la juventud ante un templo abarrotado de fieles en el que no ha faltado el alcalde de Bilbao, Iñaki Azkuna, junto a miembros de su corporación con la excepción de los representantes de Bildu.
Los miembros de esta coalición ya habían anunciado que no iban a acudir a esta cita, aunque una edil de Bildu sí que ha acompañado hoy a la corporación hasta la basílica, aunque no ha entrado en la misa, según han confirmado fuentes del consistorio.
Durante la homilía, el obispo de Bilbao ha opinado que se ha prestado «poca atención» a las «raíces antropológicas» y «éticas» de la crisis económica y se han dedicado esfuerzos «únicamente a aspectos técnicos».
Iceta ha apelado también a reflexionar sobre «la resolución de la violencia y el terrorismo, la persistencia de la violencia contra las mujeres y los brotes de xenofobia y de intolerancia«.
El obispo ha hecho referencia a las «terribles» hambrunas en Somalia o Etiopía, a la «violencia cruel» que está sufriendo el pueblo sirio y otros pueblos de oriente o a los «graves» disturbios en Inglaterra y la matanza de jóvenes en Noruega.
Iceta ha asegurado que para construir una «civilización verdadera donde las injusticias, el hambre y la violencia puedan ser erradicadas» es necesaria una «educación en la verdad y el bien», «en valores», que «genere virtudes personales y sociales».
Al término de la misa, el alcalde de Bilbao ha realizado en el interior del templo una ofrenda floral y ha pedido a la Virgen de Begoña «ayuda» para salir de una crisis económica fruto del «incremento de la ambición y la avaricia».
«La avaricia nos ha arruinado moralmente» ha dicho Azkuna quien en esta ocasión no ha realizado declaraciones posteriores a los medios de comunicación.
El alcalde de Bilbao ha pedido también a la Virgen «ayuda» para que se acabe la violencia en Euskadi y «podamos vivir en paz y libertad».
«Son muchos años de sufrimiento, muchas víctimas inocentes, muchos años de soportar a ETA y ya es hora de que este pueblo pueda convivir a través de los medios democráticos», ha afirmado Azkuna quien ha apelado a la transformación del «odio» en «respeto hacia todas las ideas y argumentos».
La celebración de la festividad de la Virgen congrega a miles de fieles que a lo largo de todo el día han peregrinado desde diversas partes de Bizkaia para acudir hasta la basílica de Begoña. (RD/Efe)
