En el camino de "relectura de la Santa" que está haciendo la orden del Carmelo Descalzo, se encuentran los preparativos del V centenario del nacimiento de la mística en Ávila en 1515
El manuscrito de la obra de Santa Teresa ‘Camino de Perfección’ ha servido para inaugurar el II Congreso Internacional Teresiano, que gira en torno a esta obra escrita entre los años 1565 y 1567.
Un centenar de participantes acude hasta el domingo al congreso en la Universidad de la Mística, en el segundo encuentro que se celebra con la mirada puesta en el V centenario del nacimiento de la mística.
Con motivo del congreso puede observarse, hasta el miércoles, el manuscrito que se conserva en el Monasterio de las Carmelitas Descalzas de Valladolid, junto a una exposición de antiguas ediciones del libro y la explicación de cómo surgió la obra y los mensajes que ofrece en sus páginas.
El prepósito general del Carmelo Descalzo, Saverio Cannistrá, que ha pronunciado este lunes la conferencia inaugural ‘El Camino de Perfección para el hombre y la Iglesia de hoy’, ha dicho que esta obra se encuentra vigente en la actualidad, porque «no es un libro simplemente de palabras o de teorías», sino que «transcribe la experiencia, la vivencia de la Santa y los problemas concretos de la vida«, que a su juicio «son los mismos ayer y hoy».
Ha explicado que en el camino de «relectura de la Santa» que está haciendo la orden del Carmelo Descalzo, se encuentran los preparativos del V centenario del nacimiento de la mística en Ávila en 1515. Cannistrá ha dicho que los carmelitas se han decantado en los años previos por «profundizar en la relectura» de Santa Teresa, y han apostado por impulsar un «trabajo hacia el interior de la orden, más que hacia el interior de la misma».
Según el máximo responsable de los carmelitos descalzos, esta labor «está dando muchos frutos«, especialmente entre «las comunidades de los frailes y las monjas, a las que esta forma de trabajar está dando aliento a las comunidades para su vida espiritual». En el primer congreso de esta serie, celebrado en 2010, se analizó el ‘Libro de la vida’, cuyo manuscrito también pudo verse en Ávila.
Cannistrá ha explicado, por otra parte, que el manuscrito «no debe ser considerado como un libro de oración para aprender a orar, porque la Santa ya dice que existían muchos libros, y muy buenos, hechos sobre la oración».
«El libro -ha añadido- es algo más específico y más fundamental que radical, un testimonio y una reinterpretación del Evangelio para el hombre moderno», de forma que sea «una manera de fundamental la persona humana, dándole una seguridad existencial en la relación con Jesucristo».
Según ha subrayado, la mística abulense tenía una comprensión del hombre y de la existencia humana «tan profunda«, que extrae «conclusiones muy modernas y actuales», ofreciéndole «un fundamento y una estabilidad que aún le falta».