Entré en el desierto ateo y salí creyente
(Catalunya Cristiana).- Filmar lo invisible. Explorar el misterio. Éste es el reto apasionante que afronta el cineasta Éric-Emmanuel Schmitt (Lyón, 1960) cada vez que se pone detrás de la cámara. En una entrevista a Catalunya Cristiana, el director reconoce que «el cine es un arte paradójico para expresar el misterio». El director francés estuvo hace unos días en Barcelona para recoger la Ola de Oro de los Premios Familia 2011 por su película Cartas a Dios.
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