Los médicos no tienen problemas de señalar lo sucedido de "milagro"
(Protestante Digital).- La historia de Fabrice Muamba sigue conmocionando a todos los aficionados al fútbol. Lo que parecía una terrible desgracia para el jugador de 24 años se ha convertido en uno de los testimonios más emotivos vividos en este deporte.
Porque el joven futbolista inglés, de origen congoleño, hoy se encuentra estable, sonriente y sin rastro de los daños que deberían haber provocado en su cerebro los 78 minutos en los que su corazón estuvo parado y sólo con reanimación cardiopulmonar. Muamba ahora confía en volver pronto al terreno de juego. Los médicos certifican esta posibilidad y no tienen problemas de señalar lo sucedido de «milagro».
Para leer el artículo completo, pinche aquí