Definen la experiencia de estos encuentros como «muy bonita» porque permiten «compartir la fe» a las familias
Cientos de familias españolas que se dirigen estos días hacia la ciudad de Milán para participar en el VII Encuentro Mundial de las Familias (se celebra hasta el próximo domingo 3 de junio) han pedido más apoyo para la conciliación de la vida laboral y familiar, para la defensa del derecho a la vida y para la familia formada por un hombre y una mujer abiertos a la vida.
El párroco de la Iglesia Virgen del Camino de Madrid, Roberto Rey, que viaja hoy hacia Milán junto a 18 personas de cuatro familias ha destacado que esperan ver en Milán un millón de familias junto al Papa Benedicto XVI, que presidirá el evento, para testimoniar ante el mundo lo que significa «ser familia» con «un esposo, una esposa y sus hijos».
La familia, según ha precisado, es el «colchón y el bien de la sociedad donde uno es querido como es y no como debiera ser» y sin ella, la sociedad «va a peor». No obstante, ha señalado que en la actualidad hay «una enfermedad grande» en la sociedad occidental, donde, aunque la familia es una institución muy valorada, sin embargo está «muy atomizada y muy amenazada por corrientes de vida que la anulan», por los divorcios o los abortos.
Para Rey, las familias españolas necesitan ser apoyadas en la conciliación, sobre todo, en una época en la que tanto padre como madre trabajan y también en el asunto de los domingos ya que, según ha indicado, al tener que trabajar también el domingo, se convierte en un día normal y es difícil mantenerlo como un día festivo que compartir en familia.
«Las familias tienen mucho que decir al mundo»
El padre de familia Antonio Wagener cogerá también este viernes el avión junto a su mujer y a su hijo de 14 años para participar en el Encuentro de Milán después de haber participado ya en 2006 en el Encuentro Mundial de las Familias de Valencia, en aquella ocasión también junto a sus otros dos hijos que ahora no pueden acompañarles por coincidir con la Selectividad. Wagener, que viaja hacia Milán en un grupo con otras 25 personas, ha definido la experiencia de estos encuentros como «muy bonita» porque permiten «compartir la fe» a las familias que «tienen mucho que decir» al mundo.
Una vez en Milán, este viernes, se encontrarán con Benedicto XVI en la Plaza del Duomo desde donde el Santo Padre dirigirá un discurso a la ciudadanía. Por la tarde les acogerán en las parroquias o en familias voluntarias y al día siguiente participarán, al igual que el resto de familias madrileñas en la misa que celebrará el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco Varela. Además, el sábado y el domingo acudirán a la «Festa delle Testimonianze» que tendrá lugar en el Parque de Bresso. (RD/Ep)