Me has hecho releer y revivir en otra clave recuerdos y gestos de Jesús que he leído y meditado mil veces, pero contigo lo he podido hacer en otra perspectiva, siempre luminosa, bella, humana, abierta a la fidelidad y a la felicidad
(Xabier Pikaza).- Tengo el gozo y honor de evocar (aunque quizá un poco tarde) el libro de Jesús Bastante, periodista especializado en temas religiosos (ha formado parte de la plantilla de ABC, hasta que debió «dejarlo» por imposiciones poco profesionales y poco éticas de algunos estamentos de Iglesia), redactor de RD, autor de obras significativas sobre el «cristianismo hispano», desde los más duros y dulces testimonios de los «mártires» de la guerra civil española hasta el surgimiento pseudo-religioso de ETA.
Yo andaba con el Jesús de Marcos, y mi Evangelio, al que llamo INRI (un libro gordo sobre Jesús, una narración histórica sobre Juan Bautista y Jesús de Nazaret…), sin demasiado tiempo para otras lecturas, a no ser las puramente profesionales, hasta que hace tres días he parado y me he dejado impactar por estas «memorias del resucitado». He comenzado a leer… y muy pronto el tema y texto del libro me ha parecido lo más obvio, lo más natural: ¡Pero si es así! ¡Alguien debía haber escrito estas cosas, en este momento…! De esa forma he seguido leyendo hasta el fin este evangelio que no es «apócrifo», en el sentido de escondido, sino un texto abierto y transparente, una recreación personal de la memoria de Jesús de Nazaret, narrada por él, en primera persona.
Para leer el artículo completo, pincha aquí: