"El neoliberalismo económico ha fracasado con su sacralización del beneficio y de los mercados por encima de todo"
Los diversos colectivos y movimientos que se integran en la pastoral obrera de la iglesia católica en Cataluña han expresado su apoyo a la huelga general del 14N para protestar por lo que consideran «un proceso de constante agresión a los derechos laborales y sociales de los trabajadores».
La Acción Católica Obrera (ACO), la Hermandad Obrera de Acción Católica (GOAC), las Juventudes Obreras Católicas (JOC) y el Movimiento Infantil y Juvenil de Acción Católica (MIJAC), el movimiento de Capellanes Obreros y las delegaciones de pastoral obrera de las diócesis de Cataluña han hecho público hoy un manifiesto en el que denuncian que «el sistema está demostrando su cara más inmoral y criminal».
«Las medidas aplicadas por los gobiernos de Cataluña y del Estado Español, lejos de activar la economía productiva, están provocando el aumento constante del paro (25 %), de la precariedad laboral y social, y de la pobreza en general (21 %)», explica el manifiesto.
La pastoral obrera denuncia que «no es ético, humano ni cristiano continuar impulsando obsesivamente medidas políticas que condenan a la pobreza y a la exclusión, con eliminación progresiva de los derechos sociales y laborales».
«El neoliberalismo económico ha fracasado con su sacralización del beneficio y de los mercados por encima de todo«, añade el manifiesto, que reclama «cambios profundos en los principios éticos y valores que rigen la sociedad, así como en las formas de vida y organización».
También denuncia: «vemos como los gobiernos aplican al conjunto de las clases populares recortes, medidas de austeridad, aumento de impuestos a las clases más desfavorecidas, flexibilidad laboral, congelación de sueldos etc. y como estas medidas no son aplicadas a los poderosos y a los ricos del sistema».
«La huelga general es, otra vez, la concreción crítica y reivindicativa a un proceso de constante agresión a los derechos laborales y sociales de los trabajadores«, concluye el manifiesto, que también se refiere a la convocatoria «del todo inesperada» de elecciones autonómicas del 25N y se suman a la opinión de los obispos catalanes de considerar «legítimas moralmente todas las opciones políticas» que se basen en el respeto y la democracia. (RD/Agencias)
Texto íntegro del comunicado
14-N, huelga general; 25-N, elecciones al Parlamento. Los hombres y mujeres obreros y cristianos participaremos activamente para reivindicar los derechos sociales
Todos nosotros, hombres y mujeres de Iglesia obrera y comprometida, tenemos un especial interés en el seguimiento de todo el proceso de la crisis económica. Somos especialmente sensibles y críticos con las medidas aplicadas para superarla y sus consecuencias, desde la solidaridad activa con los movimientos y plataformas ciudadanas que se enfrentan críticamente a esta situación y que elaboran alternativas.
Hoy, la sociedad catalana y el mundo están en constante movilización. El neoliberalismo económico ha fracasado con su sacralización del beneficio y de los mercados por encima de todo. Las clases populares reclamamos ahora cambios profundos en los principios éticos y los valores que rigen a la sociedad, así como en las formas devida y de organización. Y buscamos horizontes que ilusionen y nos ayuden a ir definiendo estos cambios, que han de tener como finalidad el bien común.
1 -. Se está precarizando hasta niveles insostenibles la vida política, económica, social y laboral
Hoy, el sistema está mostrando su cara más inmoral y criminal. Las medidas aplicadas por los gobiernos de Cataluña y de España, lejos de activar la economía productiva, están provocando el aumento constante del paro (25%), de la precariedad laboral y social, y de la pobreza en general (21%).Vemos como los gobiernos aplican al conjunto de las clases populares recortes, medidas de austeridad, aumento de impuestos a las clases más desfavorecidas, flexibilidad laboral, congelación de sueldos, etc. y como estas medidas no son aplicadas a los poderosos y los ricos del sistema. Constatamos que, con el fin de defender el beneficio y los mercados, «todo vale» y que la deuda la tenemos que pagar los trabajadores y las trabajadoras.
La HUELGA GENERAL es, otra vez, la concreción crítica y reivindicativa a un proceso de constante agresión a los derechos laborales y sociales de los trabajadores y trabajadoras.
Al mismo tiempo se ha producido una convocatoria de elecciones al Parlamento de Cataluña, del todo inesperada, donde se plantea, como perspectiva de fondo, la necesidad de construir un proyecto de futuro nacional, que dé a nuestro pueblo la posibilidad de salir adelante a partir de las propias capacidades. Con nuestros obispos de Cataluña «defendemos la legitimidad moral de todas las opciones políticas que se basen en el respeto de la dignidad inalienable de las personas y de los pueblos y que busquen con paciencia la paz y la justicia» (Al servicio de nuestro pueblo, CET 2011, n.5).
2. Rechazamos esta realidad
Ante la opresión de tantas personas por el sistema, creemos que no es ético, humano, ni cristiano continuar impulsando, obsesivamente, medidas políticas que condenan a la pobreza y a la exclusión, con la eliminación progresiva de los derechos sociales y laborales. La persona y el bien común, que para nosotros son prioritarios, no han sido una perspectiva de este sistema.Creemos que los criterios éticos, las actitudes y las medidas políticas llevadas a cabo en la gestión de esta crisis, han dañado el avance en democracia. Los hechos de usura manifiesta, de malversación de fondos públicos, de fraude, de engaño en la aplicación de los programas y promesas políticas han fundamentado una desafección hacia el mundo de la política y un claro rechazo y alejamiento de nuestros jóvenes.
La necesidad de ser y de luchar por nuestra dignidad de personas y de pueblo, se ha convertido hoy en una necesidad social.
3. Nos sentimos comprometidos y reivindicamos un cambio de sistema
Como cristianas y cristianos tenemos muy presentes las palabras del Concilio Vaticano II: «la alegría y la esperanza, la tristeza y la angustia de los hombres contemporáneos, sobre todo de los pobres y de todos los que sufren son también el gozo y la esperanza, la tristeza y la angustia de los discípulos de Cristo, y no hay nada verdaderamente humano que no encuentre eco en el corazón de ellos.» (Gaudium et Spes 1)Es por eso que ante esta doble convocatoria de huelga general y elecciones al Parlamento:
• Reivindicamos y nos sentimos comprometidos en la necesidad de organizar la vida social, la economía, la política, desde otros criterios que no sean los de la lógica de los beneficios, y nos ponemos a caminar como ya lo hacen, hace años, muchos hombres y mujeres militantes solidarios y muchas organizaciones del pueblo.
• Defenderemos los valores democráticos fundamentales de diálogo, voluntad de acuerdo, favorecer el bien común, la libertad de expresión, el libre derecho a decidir de los pueblos,…
• Reivindicamos claridad en los mensajes y programas políticos en cuanto a las medidas para salir de la crisis y concreción en el modelo de país al que aspiramos y queremos construir.
• Nos comprometemos a ser personas activas, participativas, críticas y solidarias en la defensa de la dignidad humana y de los pueblos. De la misma manera continuaremos
profundizando en la concreción, en el día a día, de nuestro compromiso obrero y cristiano, poniendo en primer lugar a los más pobres y débiles de nuestra sociedad.MOVIMIENTOS Y COLECTIVOS OBREROS CRISTIANOS DE CATALUÑA Y BALEARES: ACO, GOAC, JOC Y MIJAC, CAPELLANES OBREROS, RELIGIOSAS EN BARRIOS Y DELEGACIONES DE PASTORAL OBRERA DE LAS DIÓCESIS DE CATALUÑA