A. Bengoetxea señaló la deficiencia de los criterios a los que se ajustaba el discernimiento de idoneidad para acceder al seminario
(Jesús Martínez Gordo)- En septiembre de 1981 comienza J. A. Bengoetxea su rectorado. Se inicia un tiempo en el que el seminario mayor está más ocupado por la formación pastoral, por su articulación entre las diferentes etapas y por lograr con una relación más empática en el interior del seminario y con las diferentes realidades diocesanas. Es, además, un tiempo en que se dedica una buena parte de los esfuerzos a llenar de contenido la estructura fundamental heredada de los rectorados anteriores, algo que se hace con la participación directa de todos los seminaristas, formadores, instituciones y personas implicadas en la formación de los futuros presbíteros.
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