Monseñor se ejercita de provocador azuzando polémicas que chocan contra los derechos individuales y colectivos recogidos en la Constitución
El portavoz del Gobierno andaluz, Miguel Ángel Vázquez, ha pedido un «bozal» para el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, por su «ataque frontal» contra la ideología de género, después de que éste asegurara este jueves en su carta semanal que dicha ideología «destroza la familia» y sitúa al hombre «por encima de Dios».
En la última entrada de su blog personal, titulada ‘Un bozal para monseñor», Vázquez ha afirmado que el obispo de Córdoba es un representante genuino del «fanatismo religioso» y se siente «muy a gusto pisando charcos que incomodan a la inmensa mayoría«.
«A este jerarca eclesial le gusta más la sección femenina, las amas de casa serviles y sumisas a sus esposos, ese arquetipo de la mujer, mujer que tanto defiende la derecha», ha apuntado Vázquez, quien ha considerado que la posición del obispo «no puede ser más reaccionaria, se adentra hasta el tuétano en los terrenos de la misoginia, el machismo y la discriminación por razón de sexo«.
Para el portavoz del Gobierno andaluz, «Monseñor se ejercita de provocador azuzando polémicas que chocan contra los derechos individuales y colectivos recogidos en la Constitución. Su última salida de tono ha sido un ataque frontal contra la ideología de género, es decir, contra la igualdad real y efectiva entre hombres y mujeres».
En esta línea, ha considerado que el alejamiento del pensamiento católico de la realidad social se hace cada vez «más insalvable y más insufrible». Le ha trasladado al obispo de Córdoba que la igualdad entre hombres y mujer «no es sólo una cuestión de justicia social y de respeto a nuestro marco constitucional, es también una demostración de sentido común».
«¿Por qué tenemos que desaprovechar la inteligencia y el talento de más de la mitad de la población en beneficio del conjunto de la sociedad y el progreso?», se ha preguntado Vázquez, quien se ha mostrado convencido de que, «dentro de la visión retrógrada», el obispo de Córdoba hace una apelación a la familia tradicional en contraste con los distintos modelos de perdición que se apartan de la norma de la Iglesia.
El portavoz del Gobierno andaluz ha destacado también que Demetrio Fernández achaca a la ideología de género un afán de destruir la familia clásica. «Sería un nuevo Herodes, una fuerza del mal y de la muerte que lava el cerebro a niños y jóvenes«, ha apuntado Vázquez, para quien el obispo es un «iluso» por pensar que la felicidad y el desarrollo personal «sólo se hallan al amparo de sus preceptos trasnochados».
«Antes de renunciar a la igualdad, prefiero arder en los infiernos (si es que existen)«, ha subrayado el dirigente del Gobierno andaluz, quien se ha preguntado si ésta es la enseñanza que el Gobierno de Rajoy quiere introducir en las escuelas con la reforma educativa del ministro José Ignacio Wert. Y es que, según ha indicado, la religión obligatoria en los centros públicos supone la imposición de un «adoctrinamiento» no acorde a los tiempos que corren.
Vázquez ha lamentado que se haya «fulminado» la asignatura Educación para la Ciudadanía (EpC) «por algo tan dañino como enseñar los valores y principios que inspiran la Constitución y nuestro marco de convivencia». En su opinión, se está aprovechando estos momentos de incertidumbre «para recortarnos hasta la libertad de pensamiento». «Ni un paso atrás vivimos en un estado aconfesional», ha concluido.
Por su parte, la concejal de Familia y Servicios Sociales del Ayuntamiento de Córdoba, María Jesús Botella (PP), dice que respeta «mucho» las declaraciones y opiniones del obispo cordobés, Demetrio Fernández, tras alertar este jueves en su carta semanal de que «la ideología de género destroza la familia».
En una rueda de prensa, la edil municipal ha comentado que puede «coincidir o no», aunque subraya la importancia de «la institución familiar», de hecho destaca que «por primera vez existe una Delegación de Familia y Servicios Sociales» en el Ayuntamiento de la capital.
Y «por supuesto» también existe una Delegación de Igualdad, pues, a su juicio, «no debe de ser en absoluto una cosa incompatible con la otra«, es más, considera que «se debe avanzar en la igualdad y la protección de la familia de una manera armoniosa, paralela y en el seno de la institución familiar, quien la tenga», en este caso «en cualquier» tipo de familia, como ha apostillado Botella.
(Rdd/Ep)