¡Cuántas familias tienen el gozo de contar con alguna de esas personas para atender a ancianos que viven solos o para ocuparse de los niños!
(Jaume Pujol, arzobispo de Tarragona).- A finales del año pasado, Benedicto XVI escribió un mensaje para la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado, que en España se celebra este domingo, 20 de enero de 2013.
Merece la pena tomarlo en consideración, con mayor razón por cuanto el flujo migratorio ha sido tan elevado que lo que antes era raro es ahora normal: encontrarse cada día con muchas personas procedentes de otros países y culturas que han llegado a nuestra tierra en busca de un futuro mejor. Basta prestar atención a los noticiarios para advertir que millones de personas se desplazan de sus países de origen a otros vecinos o lejanos huyendo de la miseria o de la guerra, que es la mayor de las miserias, o de una dictadura que no les permite vivir en libertad.
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