La caridad es, tal vez, la única verdad bíblica que el conflicto de interpretaciones no convierte en conflicto
(Manuel Mandianes).- Hoy, la verdad se concibe como un acontecimiento, como suceso en el que todo el mundo está implicado. La humanidad está dominada por preocupaciones no pertenecientes de forma exclusiva ni a la ciencia ni a la filosofía ni a la religión. La hermenéutica no es una filosofía sino una enunciación de la existencia histórica misma en la época del final de la metafísica. Hay que dejar hablar al evento, el acontecimiento. La gente de hoy siente más a Dios a través de la precariedad y de la tragedia de la condición humana que a través del orden del mundo como le ocurría a Santo Tomás.
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