Ha lamentado así la retirada de la norma contra "la eliminación de un ser humano por voluntad de sus padres, con la colaboración de los médicos, que deben ser los primeros obligados a tutelar la vida naciente"
El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo, ha valorado la retirada del anteproyecto de ley del aborto anunciada por el Gobierno de la nación -paso que propició, por otro lado, la dimisión de Alberto Ruiz-Gallardón como ministro de Justicia- señalando que, a su juicio, este paso supone una «determinación política» que «nos llena de tristeza e incluso perplejidad».
«Es una esperanza rota y frustrada», ha subrayado Asenjo en rueda de prensa con motivo de la presentación de una acción conjunta contra el paro de la iglesia de Sevilla, en la que ha hecho suyas las consideraciones del Concilio Vaticano II según las cuales el aborto es «un crimen pésimo, esto es, abominable».
De este modo, el arzobispo de Sevilla ha recordado cómo a partir de la década de los 60 lo que se dio en llamar la aceptación social del aborto se extendió «como una mancha de aceite», siendo ello «una de las mayores desgracias de Europa en los últimos cincuenta años«.
«Teníamos la impresión de que la aceptación social del aborto estaba remitiendo: en Estados Unidos, por ejemplo, ello es evidente», ha continuado, aseverando al respecto que el anteproyecto que gestionaba el Ejecutivo nacional suponía que España se posicionara en esta línea, con «un hito en Occidente de actitud ejemplarizante».
La retirada, para Asenjo, es «una mala noticia: para mí es una pena y una desgracia». Asimismo, ha incidido en el atentado de índole moral que ello supone «para la comunidad cristiana y para los hombres y mujeres de buena voluntad que creen en la ley natural». Ha lamentado así la retirada de la norma contra «la eliminación de un ser humano por voluntad de sus padres, con la colaboración de los médicos, que deben ser los primeros obligados a tutelar la vida naciente».
Asenjo ha presentado en rueda de prensa la acción conjunta de la Iglesia en Sevilla contra el paro, una de las prioridades que mons. Juan José Asenjo ha marcado para el curso pastoral que acaba de comenzar. El lema de este proyecto –‘Ante el paro, activa tu conciencia’– sintetiza la dinámica de trabajo que se va a seguir en todos los niveles diocesanos, comenzando por los grupos parroquiales.
El arzobispo de Sevilla ha subrayado que con esta acción se trata de concienciar a los fieles de la gravedad de «una lacra social que se sufre en buena parte de España y, sobre todo, en Andalucía». Mariano Pérez de Ayala, director de Cáritas Diocesana, ha señalado que «no partimos de cero», y que esta acción supone «un paso más allá, ya que no queremos quedarnos en lo que ya hacemos». Ha puesto como exponente de la preocupación de la Iglesia por el paro, la «ingente cantidad de proyectos e iniciativas que se muestran en la guía de la acción social de la Iglesia en Andalucía», un documento disponible en internet que se va actualizando constantemente con las instituciones que se van sumando a este interés por las personas privadas de trabajo.
Diego Márquez, delegado diocesano de Pastoral Obrera, ha explicado las fases en las que se estructura esta campaña: «contamos con un material de reflexión sobre este problema que se va a distribuir en todas las comunidades parroquiales, movimientos, hermandades, etc, y vamos a tener tres encuentros centrales a lo largo del año en los que centralizaremos las iniciativas que vayan surgiendo con la finalidad de luchar contra el paro». Estos encuentros serán el 29 de noviembre, 21 de febrero y 30 de abril, esta última en la víspera de la fiesta del trabajo, y en ellos se desarrollarán encuentros de formación e intercambio de proyectos.
Mons. Asenjo ha mostrado su orgullo por «el trabajo y el compromiso de la Iglesia en este flanco pastoral», y en esta línea ha afirmado que «estamos realizando una tarea ejemplar que la sociedad reconoce«. Por su parte, el director de Cáritas Diocesano ha resumido el objetivo de esta campaña en la necesidad de «poner en el centro de nuestras comunidades cristianas la situación de los que sufren el paro». Ha subrayado que «si bien la lucha contra el paro es una responsabilidad fundamental de los poderes públicos, la sociedad civil también debe actuar, y la Iglesia se sitúa en esta posición».
Preguntado por lo que viene invirtiendo la Iglesia sevillana en acciones contra el paro, Pérez de Ayala ha recordado algunos datos del reciente informe presentado por Cáritas Diocesana: «el 20 por ciento del presupuesto de Cáritas se destina a iniciativas contra el paro y, por ejemplo, se debe destacar la tarea que desempeña la Fundación Cardenal Spínola de lucha contra el paro en este campo. Al respecto, mons. Asenjo ha subrayado que esta Fundación «no tiene la demanda que cabría esperar» a la vista de la importante labor que lleva a cabo en la ayuda a proyectos de empleo.
Finalmente, el director de Cáritas Diocesana ha matizado las expectativas positivas que arrojan «unos datos macroeconómicos que por desgracia no se traducen en la situación de los ciudadanos». A su juicio, «la mejoría en la calle no se notará hasta que no baje varios puntos el desempleo», por más que, como ha apuntado el arzobispo, «se ha notado un descenso de la demanda de instituciones que solían pedir ayuda al Banco de Alimentos».
(RD/Ep)