Hoy celebra su centenario bajo el lema Historia y futuro, en referencia al trabajo de autores y colaboradores de todo este tiempo y a la confianza de decenas de miles de lectores y suscriptores que se han asomado con interés a sus páginas
(Mensajero).- La editorial Mensajero celebró este viernes los actos conmemorativos del centenario de su fundación en 1915. La Universidad de Deusto, institución donde nació el sello de la Compañía de Jesús, acogió la celebración a la que estaban invitadas más de 150 personas, antiguos trabajadores y representantes de diversas instituciones vinculadas a su historia y que fueron recibidos con el aurresku en el vestíbulo principal.
La celebración contó con tres partes. La primera consistió en la inauguración de la Sala Mensajero, un exclusivo homenaje que la universidad dedicó a la editorial ya que se trata del primer espacio en el edificio insigne al que se le bautiza con otro nombre que no sea un profesor o un jesuita vinculado a la institución.
Para este momento especial y cercano, José María Guibert, rector de la Universidad de Deusto, y José Manuel Díaz, director general del Grupo de Comunicación Loyola (GCL) al que se integró Mensajero en 2013, estuvieron acompañados del provincial de España, Francisco José Ruiz, la concejala de Participación del Ayuntamiento de Bilbao, Jone Unzueta, el vicario de la Diócesis, Félix Alonso, el presidente de UNIJES, Jaime Oraá, el director general de Cultura de la Diputación, Gonzalo Olabarría, miembros del Consejo de Administración del GCL, del rectorado y del consejo de Gobierno de la Universidad, el presidente de la Cámara de Empresarios de Bizkaia, Iñaki Garciñuno. Las palabras de homenaje, de felicitación y de agradecimiento mutuo se dieron dentro de la sala donde hay colgada una acuarela de la Casa Taco.
Después de descubrir la placa, los invitados se dirigieron al Paraninfo para asistir al segundo momento de esta celebración. Allí Javier Riezu, de la Oficina de Comunicación de la Compañía de Jesús, dirigió un acto en el que intervinieron Guibert, en representación de la universidad que ha visto crecer a la editorial; el vicario de la Diócesis de Bizkaia, quien se detuvo en la misión eclesial de Mensajero a través de sus publicaciones, en especial el Taco; el consejero delegado del GCL Antonio Allende, quien expresó la gratitud a todas la instituciones presentes y habló de ese futuro al que se enfrenta la editorial; hablar del pasado, presente y futuro de una obra como es la editorial y cerró el provincial de España, Francisco José Ruiz quien ahondó en la misión que cumple el sello Mensajero como obra de la Compañía de Jesús, constituida con vocación de perdurar en el tiempo.
Entre estas intervenciones se estableció un coloquio entre un autor, Enrique Pallarés, un miembro del equipo humano del GCL, Marta Barrio, directora de la revista Mensajero y El Promotor; y un estrecho colaborador desde Argentina, Ignacio Javier Colabelli.
El tercer momento consistió en un lunch en el claustro donde además se pudo ver una exposición dedicada a los 100 años de historia de Ediciones Mensajero. El primer Taco, la primera revista Mensajero…tesoros que reflejan el proceso de cambio y adaptación a los tiempos de un sello centenario y con vocación de mantenerse en el futuro.
El pasado 3 de febrero se cumplía el centenario de la constitución de la sociedad anónima que dio forma jurídica a una labor editorial de años atrás. En 1866 apareció en Barcelona la primera revista El Mensajero del Corazón de Jesús de la mano del canónigo José Morgades y Gili. Su labor consistió en traducir al castellano el boletín que el jesuita francés Ramière difundía en Francia como parte del movimiento del Apostolado de la Oración. Al ser nombrado obispo de Vich en 1883, Morgades entregó la revista a la Compañía de Jesús, que la trasladó a Bilbao en 1884. El responsable de la dirección fue el padre Cecilio Gómez Rodeles y desde entonces se ha editado ininterrumpidamente mes a mes hasta hoy.
En 1886 apareció la publicación del primer Taco calendario del Corazón de Jesús, uno de los mayores éxitos de la editorial, con casi 300.000 ejemplares vendidos al año. El padre Rodeles desarrolló la idea y desde entonces, fiel a su esencia, el taco ha crecido en modelos de publicación. Hoy está disponible como aplicación para dispositivos móviles.
A finales del siglo XIX, la revista alcanzó una gran repercusión popular con las entregas de varias novelas y cuentos del padre Luis Coloma. Y en 1915 fue el jesuita Remigio Vilariño quien fundó la editorial en sociedad anónima dando forma a lo que era la redacción de la revista El Mensajero y la publicación de folletos y libros de devoción. Él mismo también destacó como escritor por obras como La vida de Nuestro Señor Jesucristo, la adaptación del catecismo del padre Astete, su popular Devocionario, y como fundador de varias revistas, como la todavía hoy vigente Sal Terrae.
A lo largo de todo este tiempo, Mensajero ha editado cientos de títulos de diversas temáticas y productos que han llegado a miles de hogares: además del Taco Calendario Corazón de Jesús y de la revista Mensajero, otros libros le han dado a conocer en España e Hispanoamérica. La colección Psicología moderna, El drama de Jesús, La Biblia del Peregrino, En casa con Dios, y más recientemente La Biblia de Nuestro Pueblo, producción de literatura infantil y juvenil y el Ecocalendario.
Mensajero superó en 1983 la grave inundación que asoló la ciudad en pleno traslado de la Universidad de Deusto (donde estaba ubicada desde sus inicios) a su sede actual, a pocos metros también en el barrio de Deusto. Tras la catástrofe, se recuerda con inmensa gratitud el respaldo en un momento tan difícil de muchos donantes y de la propia Compañía de Jesús. Durante la Congregación General en la que fue elegido nuevo general, Peter-Hans Kolvenbach, los jesuitas se unían para apoyar expresamente y con fuerza su recuperación.
Superada esa etapa, Mensajero comenzó a adquirir unas dimensiones que la afianzaron e impulsaron a un futuro de nuevas aspiraciones. Precisamente de su vocación de servicio a la promoción de la fe y la justicia nace la unión con los proyectos jesuitas de la editorial Sal Terrae y la oficina de producción digital SJDigital: el Grupo de Comunicación Loyola, al frente de cual están Antonio Allende, SJ y José Manuel Díaz.
Hoy celebra su centenario bajo el lema Historia y futuro, en referencia al trabajo de autores y colaboradores de todo este tiempo y a la confianza de decenas de miles de lectores y suscriptores que se han asomado con interés a sus páginas. Y desde esta perspectiva, el proyecto editorial mira al futuro afianzado en su vocación de servicio a la Iglesia y a la sociedad. Su equipo seguirá trabajando para Llegar a más.