Vivir nuestro ministerio con humildad, sencillez, austeridad y cercanía con la gente
(Javier Rodriguez Orozco).- 1. Introducción: Francisco, un ejemplo a seguir. Querido Pueblo de Dios aquí reunido, gracias por su presencia. Estimados hermanos sacerdotes que nos acompañan, gracias por estar aquí. Estimado señor obispo Felipe, muchas gracias por acompañarnos y presidir esta celebración.
En esta homilía de nuestro XXV aniversario sacerdotal, quiero proponer a mis compañeros sacerdotes y a todos los hermanos sacerdotes aquí reunidos, el ejemplo de vida sacerdotal del papa Francisco quien con su ministerio, ha dado a la iglesia y más allá de la iglesia, los frutos que Jesús espera siempre de sus discípulos, como hemos escuchado en el evangelio de hoy (Jn 15, 12-17).
– El señor obispo Felipe, nos comentó en Ayotlán en una de sus visitas: «Acabo de leer la exhortación del papa Francisco, «El gozo del Evangelio» (EG), y no tiene desperdicio, muy buena…».
¡Nada tiene deperdicio en el papa Francisco: sus gestos, actitudes y palabras, son evangelio vivo, presencia de Jesús. No lo desperdiciemos, aprendamos de él.
Bernie Sanders, candidato demócrata a la presidencia de EU, en discurso en el Vaticano el pasado viernes hizo alusión al Papa Francisco: «su espíritu y valentía, han hecho que sus palabras hayan ido mucho más allá de la Iglesia católica.. el Papa inspira al mundo».
Hermanos sacerdotes: estamos llamados a inspirar nuestras parroquias con el anuncio y vivencia del evangelio como lo hace el papa en la iglesia y más allá de ella.
Escribí en mi página de la invitación que hicimos:
«Bendigo a Dios por el papa Francisco que ha traído la Primavera Pastoral que tantos deseamos ver florecer en la Iglesia. Sus continuos llamados a la autocrítica pastoral, a la renovación de la Iglesia, a la apertura de lo diferente aprendiendo de todos, a la no condenación sino misericordia, a tantas situaciones que la Iglesia necesita cambiar y renovar…me han hecho más papista que los papistas de siempre.»
Por eso desde su elección el 13 de marzo de 2013, le he seguido las huellas en sus homilías en santa Marta y sus discursos en todas partes. No me equivoqué cuando presentí en su presentación al mundo, que S, como lo ha sido y ojalá lo siga siendo por mucho tiempo…
2. Cinco propósitos-actitudes de renovación sacerdotal hacia el futuro, inspirados en el papa Francisco.
2.1. Pensar y definir la vida no por los años que tenemos sino por las actitudes que vivimos
No son los años, sino las actitudes que vivimos las que definen nuestra vida: Jesús vivió pocos años predicando y su mensaje le dio y sigue dando un nuevo rumbo a la historia; los dos papas elegidos más ancianosen los últimos tiempos le dieron un nuevo rumbo a la Iglesia: Juan XXIII elegido a los 77 años (Concilio Vaticano II) y Francisco a los 76 (Continuidad real de esa primavera eclesial).
Hermanos sacerdotes: no pensemos en los años que tenemos de ordenación, 25, 30, 40, 50 y más, sintiéndonos «viejos y aburridos» sino en las actitudes que debemos tener para renovarnos continuamente y que vemos en el papa Francisco: vive y habla de la novedad del evangelio; abraza, besa y acaricia al pueblo de Dios (cariñoterapia); recibe a pecadores públicos, transexuales, prostitutas, etc (papa de la misericordia); quiere y da ejemplo de una iglesia «casa de campaña» para los dolientes y marginados y no una «aduana» que excluye y margina (papa que inspira al mundo, querido y reconocido fuera de la iglesia)… y más, mucho más a sus 79 años de edad, 46 años de sacerdote, 23 de obispo y 3 años con 1 mes de papa.
2.2. Tener siempre una mentalidad abierta, no cerrada, que busque renovación en nosotros y en la Iglesia
Todo en el cuerpo humano envejece con los años. No lo podemos evitar. Lo que sí podemos y debemos evitar es que envejezcan nuestras ideas y mentalidad que siempre deben renovarse contínuamente como piensa, vive y predica el papa Francisco. Un botón de muestra, en su primera vigilia pascual de 2013:
«Hermanos y hermanas, no nos cerremos a la novedad que Dios quiere traer a nuestras vidas. ¿Estamos acaso con frecuencia cansados, decepcionados, tristes; sentimos el peso de nuestros pecados, pensamos que no lo podemos conseguir? No nos encerremos en nosotros mismos, no perdamos la confianza, nunca nos resignemos: no hay situaciones que Dios no pueda cambiar, no hay pecado que no pueda perdonar si nos abrimos a él» (30 marzo 2013).
El evangelio al que consagramos nuestras vidas, es Buena Nueva, novedad: el vino nuevo que necesita de vasijas nuevas para no echarse a perder (Mt 9, Mc 2 y Lc 5). La Iglesia necesita mucho de sacerdotes que sean agentes de renovación en sus parroquias, al estilo de Jesús: «El que está en Cristo es una persona nueva» (II Cor 5,17).
El Papa ha traído mucha novedad al ministerio petrino y sacerdotal con sus gestos y enseñanzas: Desde su misma elección, se presenta como «obispo de Roma» y no como «papa», privilegiando la colegialidad sobre la autoridad; pide oración por él antes de bendecir dándole primacía al pueblo de Dios; consulta a la iglesia en pleno mediante cuestionarios para saber la realidad de las familias desde su situación, antes y para los sínodos sobre las familias (nunca antes hecho); forma un grupo de nueve cardenales, la mayoría no curiales, que le ayuden en las reformas de la iglesia; a simplificado haciendo más ágil y menos costosa, la normativa jurídica sobre la nulidad de los matrimonios; ha decretado que en el rito de lavatorio de pies del jueves santo, también se pueden incluir mujeres como pueblo de Dios que son; vive en el hotel del vaticano, come con los que comen ahí mismo, saluda a quien se encuentra…; ha saneado la corrupción que había en las finanzas del vaticano; en su exhortación «El gozo del Evangelio» (EG) donde ha querido «indicar caminos para la marcha de la Iglesia en los próximos años» (EG 1) nos ha pedido que abandonemos «el cómodo criterio pastoral del «siempre se ha hecho así».«Invito a todos a ser audaces y creativos en esta tarea de repensar los objetivos, las estructuras, el estilo y los métodos evangelizadores de las propias comunidades» (EG 33).
En la reciente exhortación sobre «La Alegría del Amor» (AL), ha dado un giro a la mentalidad y forma de tratar la problemática familiar que vivimos hoy… y muchos gestos, actitudes y palabras más que exhiben a un papa que vive lo que predica: en varias ocasiones ha pedido a los jóvenes hacer lío en la iglesia para renovarla, el mismo lío que está haciendo para que la Iglesia viva cada vez nmás, como Jesús la quiere.
2.3. Vivir más el ministerio sacerdotal, en la periferia existencial y pastoral
Con los pobres (de sus primeras palabras como papa: «como deseo una iglesia pobre y para los pobres» y lo vive en lo que dice y hace). Es fácil y agradable convivir con los ricos, servir a los de dinero para los que siempre se pueden las cosas que piden, pero es más incómodo y ponemos más pretextos cuando se trata de los pobres, de los que no dan «propinas ni regalos». El papa nos invita a cambiar esta actitud y servir a todos por igual y quizá con preferencia a los pobres. El papa ha mandado construir DENTRO DEL VATICANO, cuartos de hospedaje, baños públicos, comedores públicos para los más pobres de Roma. En días pasados se trajo a vivir al Vaticano a tres familias (12 personas) de refugiados sirios de regreso a Roma en su visita a los refugiados en la isla de Lesbos, Grecia…y más, mucho más.
Con los presos. Ha visitado varias cárceles y en Roma ha celebrado misas en ellas. «Yo soy un pecador como ustedes» les ha dicho a los presos.
Con los enfermos. Siempre se detiene a saludarlos y con frecuencia a orar por su salud, en sus giras los visita y saluda siempre, en hospitales, orfanatos, etc. Es palpable su estima y ánimo por los enfermos.
Los ancianos. Constantemente los menciona para quererlos, valorarlos y amarlos como él lo hace cuando se encuentra con ellos: «Ancianos y jóvenes, son la esperanza de la humanidad. Los primeros aportan la sabiduría de la experiencia; los segundos nos abren al futuro, impidiendo que nos cerremos en nosotros mismos» (enero 2014)
Con los excluidos y marginados. Vive y recibe y nos pide a todos Aceptación, Respeto Y Apertura Misericordiosa (que no siempre quiere decir, aprobación) de su situación a los pecadores de fama pública: Homosexuales, transexuales, Lesbianas, divorciados vueltos a casar…
Hermanos sacerdotes: las periferias existenciales y pastorales de nuestras parroquias son poco visitadas por nosotros sacerdotes y reclaman nuestra presencia con el mensaje de aceptación, amor, perdón y vida nueva de Jesús.
4.Renovar el celo apostólico por Jesús y su evangelio en nuestro trabajo pastoral
Les confieso que me llené de gozo, al leer en la «Exhortación El gozo del Evangelio», en su número 33, las palabras que yo siempre he tenido en mi mente, corazón y proceder pastoral en estos 25 años y en las distintas actividades…
EG 33: «La pastoral en clave de misión pretende abandonar el criterio pastoral del «siempre se ha hecho así». Invito a todos a ser audaces y creativos en esta tarea de repensar los objetivos, las estructuras, el estilo y los métodos evangelizadores de las propias comunidades».
Lo mismo que las escritas en el número 49:
EG 49. «Salgamos, salgamos a ofrecer a todos la vida de Jesucristo… Si algo debe inquietarnos santamente y preocupar nuestra conciencia, es que tantos hermanos nuestros vivan sin la fuerza, la luz y el consuelo de la amistad con Jesucristo… Más que el temor a equivocarnos, espero que nos mueva el temor a encerrarnos en las estructuras que nos dan una falsa contención, en las normas que nos vuelven jueces implacables, en las costumbres donde nos sentimos tranquilos, mientras afuera hay una multitud hambrienta de Jesús».
Hermanos sacerdotes: si esto lo dice y vive un papa de 79 años, lo podemos decir y vivir nosotros de 50 y más.
5. Vivir nuestro ministerio con humildad, sencillez, austeridad y cercanía con la gente
Francisco papa, elige vivir en el hotel santa Marta no en el palacio vaticano: quiere convivir con la gente; rechaza y denuncia todo lo que tenga sabor a presunción, lujo, carrerismo dentro de la iglesia; el sentirse príncipes de la iglesia en lugar de servidores del pueblo de Dios les ha dicho a los obispos con frecuencia; saluda a quien le extiende la mano sin prejuicios, acaricia toda mirada necesitada, invita a subir junto a él a la ventana pontificia desde donde dirige sus audiencias generales a niños, jóvenes…; ha invitado a subir al papa-móvil a quien conoce y desea que le acompañe; permitió que un niño le robara la atención al subirse a la silla pontificia y presidir desde ahí a los MCS en una de sus audiencias; saluda a los peregrinos que se encuentra en sus caminatas por el vaticano, les ha dicho que el Vaticano es su casa y se toma fotos con ellos, hasta selfies tienen varios turistas con él; se pone lo que le regalan, se toma lo que le ofrecen… todo un papa dándose, abrazando, acariciando, sonriendo, saludando, orando, motivando…al pueblo de Dios que siempre abarrota la enorme plaza de san Pedro para ver, escuchar, saludar y orar por el papa de la primavera eclesial que les recuerda tanto a Jesús de Nazaret cuando «pasó por el mundo haciendo el bien y sanando a los oprimidos» (Hech 10,38).
Hermanos sacerdotes: me invito con ustedes a renovar los deseos de vivir así el llamado que Jesús nos ha hecho para amar y servir a su pueblo. En este papa santo de 79 años, tenemos un vivo ejemplo de que esto y mucho más es posible, si queremos.
* Pero también, resistiendo con valor y decisión las críticas y rechazos por ser fieles a Jesús.
Toda esta forma de pensar, hablar y vivir su ministerio papal, le ha traído a Francisco duras críticas y rechazos más dentro de la iglesia que fuera de ella. Duele que nos muevan el tapete para despertarnos del sueño placentero del poder y sus privilegios como lo está haciendo Francisco desde su inicio como papa. ¡Animo papa Francisco, tu ejemplo de vida nos acerca a Jesús y su evangelio!
En internet, hay toda una página de sacerdotes «anónimos» dedicados a cuestionar y criticar todo lo que dice y hace el papa. En días pasados, el cardenal norteamericano Raymond Burke que gusta de lucir una capa cardenalicia de 9 metros, criticó y rechazó la última exhortación del papa sobre «La Alegría del Amor» (AL) donde muestra un giro de apertura al tratar la problemática familiar de hoy, al decir que se trata solo de «una reflexión personal del papa, no del magisterio de la iglesia».
Es lamentable saber esto de un cardenal pero así suelen reaccionar quienes ven en peligro sus privilegios. Burke, encabeza la oposición al papa en las altas esferas del poder.
– El buen Francisco, sabe de las debilidades humanas y cardenalicias, conoce y está encarnado en la Palabra de Dios que siempre invita a conocer regalando varias veces evangelios a los peregrinos e invitándoles a leerlos y vivirlos. Conoce la advertencia paulina, inspirada por Dios, a quienes le son fieles como él: «Todos los que quieran llevar una vida digna de Jesucristo, sufrirán persecuciones» (II Tim 3,12). Oremos mucho por el papa Francisco.
Hermanos sacerdotes: renovemos hoy nuestra decisión sacerdotal por Jesús el único sacerdote y pastor que nos ha compartido de su sacerdocio y pastoreo para servir a su Pueblo. En el papa Francisco tenemos un gran ejemplo a seguir, no lo desperdiciemos y aprendamos de él. Muchas gracias.
(Nota. Gracias a las personas que me agradecieron y felicitaron por esta homilía: varios hermanos sacerdotes, entre ellos mi rector de seminario, don Clemente Castañeda; muchas personas después de misa y durante la comida. Bendigo a Dios por seguir usando instrumentos frágiles para anunciar su Palabra).