Nadie, ideológicamente tiene la exclusiva de los pobres
(Antonio Ramos Ayala).- Como muchos de vosotro/as llevo algún tiempo serenamente indignado. Estoy indignado por tener que vivir en un país en el que todo lo que son signos patrios, entiéndase bandera, himno, orgullo de sentirme español…sea interpretado por algunos como cosa atávica propia del régimen franquista y no del siglo XXI.
Pareciera que por narices tenga que seguir existiendo la España dividida que nos lleva a una España vergonzante (sentir vergüenza de ser español). Que nos lanza a una España que se mira cada dia mas al ombligo mientras se hunde en el fango de la ineptitud de algunos.
Yo quiero hoy reivindicar el derecho a sentirme orgulloso de ser español sin que nadie me lo reproche y sin ofender por ello a nadie que piense distinto. Quiero reivindicar la capacidad de darnos la mano y luchar juntos por este país roto, al margen de la quimera ideológica de cada uno. Que lo primero sea el bien del pueblo español y no vivir apalancados en pasadas o modernas ideologías.
Aunque nací en el régimen de Franco he pasado la mayoría de mi vida sin Franco. No entiendo esa cuasi obsesión por mantener vivo el pasado. Franco ya murió y vivimos una trancision aceptable para lo que había.
Estoy avergonzado de la ‘casta’, como se le ha dado por llamar ahora a la clase política, que tienen este país anclado en el «sin gobierno» y siendo el hazme reír del concierto de las naciones. Esta «casta» conste que no es sólo de un único pensamiento. También los que llamaban «casta» acabaron siéndolo.
Me siento perplejo ante unos políticos que no son capaces de renunciar, ceder, poner por encima de sus ideologías el bien real de miles de españoles. A mi me da igual quien gobierne. De derechas, de izquierdas o de centro, siempre y cuando gobierne en bien de todos y en especial de los más desprotegidos. Nadie, ideológicamente tiene la exclusiva de los pobres. Todos los políticos, sean cuales sean sus ideas políticas, tienen el deber grabe de procurar el bien del más abandonado, sin usarlo como banderín de campaña.
Estoy indignado porque vivimos sin gobierno, pero cobrando sueldos, que en algún presidente autonómico pasa de los 100.00 euros al año. Esto si que es de vergüenza.
Algunos amenazan con que se acabara la bolsa de las pensiones. ¿Acaso es demagogia pedir a nuestros politicos que cobren sueldos moderados ante la necesidad perentoria de muchos españoles? ¿Será demagogia pedirles que ya que se lanzaron al ruedo de la política, entiendan y practiquen, lo que llamamos, vocación, entendendimiento y diálogo? Dialogar en politica siempre es el arte de estar dispuesto a perder algo de lo mio, no para ti, sino en bien de todos. Dialogar no es la actitud empecinada de ver solo mis intereses. Es acercamiento por el bien patrio, por el bien de todos los españoles.
¿A que macabro juego están jugando quienes nos gobiernan o dicen querer gobernarnos? Que alguien más instruido me lo explique, yo simplemente no lo entiendo.
Seguramente tendremos que votar otra vez. Yo seguiré votando, porque sigo creyendo que aún habrá por esta patria algunos hombres con altura de miras en el arte de saber gobernar.
Buenas noches, es cuasi madrugada, cuando escribo esta «perorata» política, trasnochada de dolor. Que Dios nos ampare, ya que la «casta», incluyendo a todos los partidos, aun no nos han amparado.
