Ni siquiera un obispo tiene derecho a considerar reprobable o a hacer valoraciones sobre los modelos de familia. No es ese el amor que dice el papa Francisco que debe expresar la Iglesia
La polémica pastoral del obispo de Solsona, Xavier Novell, relacionando la homosexualidad con la figura paterna «ausente desviada, difuminada», ha desatado un alud de críticas. Así, la directora de Igualdad de la Generalitat, Mireia Mata, ha instado al prelado a que «recapacite y no añada preocupaciones irracionales» a familias creyentes sin padre.
Bajo el título «Amor que se convierte en fecundo», Novell se preguntaba «si el fenómeno creciente de la confusión en la orientación sexual de muchos chicos adolescentes no será debida a que, en la cultura occidental, la figura del padre estaría simbólicamente ausente, desviada, difuminada» e incluso si «la virilidad parecería cuestionada».
Ante esto, Mireia Mata anunció que ha enviado la glosa del obispo a los servicios jurídicos del Departamento de Asuntos Sociales y Familia por si eran constitutivos de una falta o delito de homofobia, pero los letrados no han encontrado motivos suficientes para abrir expediente sancionador, al amparo de la ley contra la homofobia.
«Son unas expresiones deplorables, que demuestran mucha ignorancia sobre la realidad, pero los servicios jurídicos no han encontrado que sea un hecho sancionable», ha explicado Mata.
La ley contra la homofobia aprobada en Cataluña establece en su artículo 34 que son sancionables todas las «expresiones vejatorias, que inciten a la violencia o que comporten aislamiento y rechazo al colectivo LGTBI».
Mata se ha planteado enviar una comunicación a la Iglesia en Cataluña porque «nos preocupan estas manifestaciones que generan inquietud, incluso a su propio colectivo y ponen en cuestión a las familias monoparentales».
«Ni siquiera un obispo tiene derecho a considerar reprobable o a hacer valoraciones sobre los modelos de familia. No es ese el amor que dice el papa Francisco que debe expresar la Iglesia. Nos gustaría que recapacitase, porque de la manera en que se expresa no podemos abrirle un expediente sancionador, pero sí reprobarle y rechazar lo que dice. Tiene que reflexionar», ha añadido Mata.
«No puede ser que un obispo haga sentirse mal a una madre por ser familia monoparental o por tener un hijo homosexual. Eso forma parte de nuestra riqueza y nuestra diversidad. Tendría que recapacitar antes de hablar de la vida de otras personas porque puede causar mucho daño a personas que han perdido a su pareja y sean creyentes. Es una desgracia que les pueda hacer sentir como que dan una mala educación», ha concluido Mata.
Tras polémica desatada el domingo, el Observatorio contra la Homofobia (OCH) ha denunciado el escrito del obispo Novell ante la Generalitat «por posible incidencia homófoba» y ha pedido la aplicación de la ley contra la Homofobia.
El colectivo LGTBI Colors de Ponet, que llevó las palabras del prelado ante el OCH, considera «una vergüenza» que Novell haya asociado la «confusión de orientación sexual» de los adolescentes con la falta de la figura paterna, consideran homópfobas sus palabras y critican que la visión de este obispo marque la línea de pensamiento de multitud de personas cristinanas.
Por su parte, la consellera de Trabajo, Asuntos Sociales y Familia, Dolors Bassa, ha lamentado que «27 años después de que la OMS eliminase la homosexualidad de la lista de patologías, todavía hay quien no lo ha entendido».
El propio Ayuntamiento de Solsona ha expresado en su perfil de Twitter su «rechazo a las desafortunadas manifestaciones del obispo Xavier Novell en su última glosa» y ha reafirmado su «pleno apoyo a las familias monoparentales y al colectivo LGTBI». «Lamentamos que se asocie a Solsona con tal opinión retrógrada«, concluye el tuit municipal.
Por su parte, el alcalde de Cervera, Ramon Royes, ha anunciado que llevará al próximo pleno una proposición para declarar al obispo Novell como «persona non grata» en su ciudad porque considera que su opinión es «escandalosa, anacrónica e inaceptable».
(RD/Agencias)