Este instituto teológico de Madrid es un centro muy significativo en la Iglesia de España, un faro y un foco que ha iluminado e ilumina la formación y la vida de tantos miles de religiosos en todos sus años de andadura
(masdecerca.com).- Aunque las aulas ya estaban funcionando desde algunos días antes, ayer, día 21 de septiembre, alumnos, profesores y autoridades académicas daban comienzo oficial al curso 2017-2018 en el Instituto Teológico de Vida Religiosa y en la Escuela Regina Apostolorum (ERA) de Madrid.
El cardenal de Madrid, Mons. Carlos Osoro no quiso dejar de hacerse presente en el evento. Los actos de inauguración del nuevo curso daban comienzo con una misa solemne presidida por el obispo de Mondoñedo-Ferrol, Mons. Luis Ángel de las Heras.
Una Eucaristía concelebrada por un nutrido grupo de sacerdotes en la que el obispo claretiano, miembro de la comisión episcopal para la vida consagrada de la Conferencia Episcopal Española, animó a la comunidad académica a vivir este curso, como S. Mateo, su vocación de seguimiento «aventurándose en los caminos que se van abriendo ante nosotros«.
Los caminos, dijo el prelado, «son procesos que se inician. Procesos que han de llevarnos a introducir cambios concretos en nuestras vidas». Después de la Eucaristía se desarrolló el resto del programa del acto académico: lectura de la Memoria académica del curso 2016-17 y una interesante disertación, a modo de lección inaugural, bajo el título «Institución y carisma. Disidencia y comunión a propósito de 3Jn», a cargo del profesor Severiano Blanco.
Presidió la mesa académica el agustino Gonzalo Tejerina Arias, Decano de la facultad de teología de la Universidad Pontificia de Salamanca, quien en sus palabras iniciales agradeció a los misioneros claretianos la labor al frente de los diversos centros académicos en los que se puede estudiar la especialidad de Vida Consagrada en el mundo.
Sin duda, señaló el decano, «este instituto teológico de Madrid es un centro muy significativo en la Iglesia de España, un faro y un foco que ha iluminado e ilumina la formación y la vida de tantos miles de religiosos en todos sus años de andadura».
El decano, igualmente, animó a los alumnos a «estudiar y a pensar», a vivir este tiempo de estudio como una «auténtica misión» que después repercutirá con calidad en la vida de la Iglesia. En la mesa del acto participaron también el director del centro y nuevo superior de la comunidad claretiana de Buen Suceso, el P. Carlos Martínez Oliveras, quien animó a los alumnos y a los profesores a entregarse al estudio con ahínco para que, como desea el papa Francisco, «nos ayude a ser capaces de interpretar la realidad con los ojos de Dios».
Por su parte, el superior provincial de los claretianos de la provincia de Santiago, el P. Pedro Belderrain, en representación del Presidente del ITVR y superior General de la congregación claretiana, P. Matheu Vattamattam, dirigió unas palabras de gratitud a las instituciones «que siguen confiando, después de ya casi 50 años, en este centro ligado a la Universidad Pontificia de Salamanca» y animó a los presentes a vivir el nuevo curso como «tiempo de gracia y bendición».
El acto finalizó con las palabras de monseñor de las Heras, dando por inaugurado el curso. Posteriormente, alumnos, profesores e invitados tuvieron la ocasión de poder compartir un vino español. Entre los asistentes estaban la presidenta de la CONFER, Rosario Ríos y también la anterior secretaria general de dicha institución, la calasancia Julia García Monge, que no quisieron dejar de acompañar, como viene siendo habitual, este acto.
