Jesús os dirige una mirada llena de ternura, como hacía en los caminos de Palestina con los que se encontraba. Su amor no os fallará jamás, sed testigos de este amor privilegiado por el don de vuestro sufrimiento
(Diócesis de Valencia).- El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, presidió ayer tarde la tradicional «Misa de las Antorchas«, ante cientos de enfermos y personas discapacitadas que llenaron la Catedral de Valencia y a los que expresó que «sois los predilectos de Dios, los que lleváis la Iglesia«.
En su homilía, dirigiéndose directamente a ellos, el Arzobispo les dijo que «vuestra misión es de un valor altísimo tanto para la Iglesia como para la sociedad. Sois, en gran medida, los que lleváis la Iglesia porque estáis unidos singularmente a la Cruz redentora de Cristo y constituís el testimonio más elocuente del Amor de Dios«.
Por ello, «los que sufrís sois los predilectos del amor de Dios, hasta el punto de que se identifica plenamente su Hijo con vosotros», insistió el Arzobispo que les alentó también a «no ceder ante la tentación de considerar el dolor como una experiencia únicamente negativa, o la de dudar de la bondad de Dios».
Al contrario, «en el Cristo paciente todo enfermo encuentra el significado de los propios padecimientos; en Cristo muerto y resucitado, la humanidad descubre una nueva dimensión de su sufrimiento, que en vez de fracaso constituye una oportunidad para dar testimonio de fe y amor«.
Así, el Arzobispo de Valencia invitó a los enfermos a «encontrar precisamente en el amor de Dios el sentido salvífico de vuestro dolor y las respuestas válidas a todas vuestras preguntas».
En este sentido, les recordó que «Jesús os dirige una mirada llena de ternura, como hacía en los caminos de Palestina con los que se encontraba. Su amor no os fallará jamás, sed testigos de este amor privilegiado por el don de vuestro sufrimiento que tanto puede contribuir a la salvación del género humano», concluyó.
La misa, que fue concelebrada por el obispo auxiliar de Valencia monseñor Arturo Ros, y por una veintena de sacerdotes, párrocos, consiliarios de la Hospitalidad de Nuestra Señora de Lourdes y capellanes de hospital, fue organizada por la delegación diocesana de la Pastoral de Enfermos y Mayores del Arzobispado y por la propia la Hospitalidad Valenciana con motivo de la Jornada Mundial del Enfermo que convoca la Iglesia en la festividad de la Virgen de Lourdes.
Al finalizar la misa, todos los asistentes «participaron en la ´Procesión de las Antorchas`, con la imagen de Nuestra Señora de Lourdes, portando cirios encendidos.
En la eucaristía participaron grupos parroquiales y profesionales sanitarios que se desplazarán hasta Valencia desde localidades de toda la diócesis, decenas de ellos con autocares desde Alcoi, Albaida y Oliva, entre otros lugares, así como enfermos, discapacitados y sus familias que participan, cada año, en la peregrinación diocesana a Lourdes.
Previamente, la Hospitalidad Valenciana celebró también en la Catedral, la imposición de medallas a miembros y voluntarios que acompañan a los enfermos durante las peregrinaciones que la entidad organiza a Lourdes.
