Ante el incalificable ataque del diario La Nación a nuestro mártir: Angelelli
(Rosendo A. Yunes).- Claramente en una entrevista con Roxana Alfieri de Vida Nueva digital 02/08/18,(Colombia) el obispo de la Rioja, de Argentina, Marcelo Colombo define: «Como un famoso pasquín riojano de los años 70: ‘El Sol’, cuyo dueño lo era también del casino que Angelelli tanto había combatido, La Nación retoma la vieja práctica de la descalificación gratuita de un hombre que supo ser un pastor ejemplar, un abnegado servidor de la comunidad cristiana y un testigo fiable de Dios en aquellos tiempos».
Sin embargo, muchos supuestos católicos, como Javier O. Ravasi, sacerdote y Abogado por la universidad de Bs As. escribe en InfoCatólica 31/08/18, sin analizar la historia, sin conocer absolutamente nada sobre Angelleli, y siguiendo la línea de los «poderosos», según Xavier Pikaza de la Gran Ramera del Apocalipsis (ramera. no por el sexo, sino por robar y matar), escribe: «El obispo riojano tenía una activa y probada vinculación con la organización terrorista montoneros, fundamentado solo en una foto publicada en La Nación donde se ve un cartel de esa organización, pero no se dice en que acto, en que año etc. Existen tantas fotos de Angelelli, en actos, con Menem, y otros personajes, como sacar así, una conclusión mínimamente racional.
Podemos pensar que esta es una jugada del grupo actual, neoliberal y de dueños de grandes empresas, que gobierna la Argentina con un presidente que no sabe o no quiere persignarse, posiblemente por su relación con la masonería, cuyos símbolos usó, como es de dominio público, en la elaboración del escudo de la policía metropolitana cuando era Intendente de Bs. As.
Pero vamos a los hechos concretos:
Angelelli: Ordenado sacerdote en 1949 con 26 años. Inició su actividad en Córdoba, Argentina, como asesor de la Juventud Obrera Católica y la Juventud Universitaria Católica, donde lo pude conocer entre 1952 y 1958. Apoyo firmemente la creación de nuestro movimiento estudiantil cristiano (Yo lo conocí y fui su amigo en esa época), no clerical, en aquellos tiempos tenían un asesor eclesiástico, denominado Integralismo orientado por el Humanismo Integral de Maritain y fundamentalmente por Mounier, que lucho contra liberales y comunistas, y defendiendo las conquistas de un movimiento nacional-popular y cristiano como fue el peronismo.
Actuó con una visión amplia de apoyo y estímulo, a los laicos cristianos obreros o estudiantes en sus asociaciones, siempre con una actitud de servicio, lejos del clericalismo que tanto critica Francisco.
Cuando fue nombrado obispo auxiliar de Córdoba en 1961 por Juan XXIII siguió en su cercanía a los obreros y los pobres diciendo: «Miren, si estas injusticias continúan, algún día estaremos juntos en el mismo paredón: ustedes los patrones y nosotros los curas. Ustedes por no haber practicado la justicia social. Nosotros, por no haber sabido defenderla». Un buen mensaje para los sacerdotes y obispos de hoy.
En 1968 Pablo VI lo nombra obispo de la Rioja. Allí con su camioneta se dedicó a recorrer toda su diócesis, iba al encuentro de la gente sufrida, con necesidades materiales y espirituales, celebrando la vida, el mate, el abrazo y el canto. Así escribió poesías.
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