González Montes: Eso es una violación de los derechos fundamentales y no puedo dar la venia religiosa si realmente no tengo en conciencia el convencimiento de que está dentro de los supuestos de mi propia confesión"
(Jesús Bastante/Ep).- Resurrección Galera ya ha regresado a su puesto de trabajo como profesora de Religión. La próxima semana, cuando regresen los niños al colegio, volverá a impartir, 17 años después, clases. Todo ello pese a la oposición de quien, en principio, debía declararla «idónea» para impartir Religión Católica: el Obispado de Almería, que hoy ha roto su silencio.
«Ahora toca cumplir la sentencia, si es que no hay más, porque, frente a esa sentencia, no cabe absolutamente ninguna otra posición, ahora mismo«, afirmó este mediodía el vicario general de la diócesis, Tomás Cobo, durante la inauguración de la XXI Semana de Teología.
Acatar la readmisión no implica que la diócesis considere ahora que Galera ha recuperado la ‘missio canonica’ para enseñar en nombre de la Iglesia. Al contrario: la diócesis «mantiene la postura» sobre su idoneidad, aunque sí ha lamentado que «desgraciadamente el conflcito se ha dilatado durante muchísimos años».
El vicario general admitió «no conocer personalmente» a Galera, y trató de lanzar balones fuera respecto al futuro. «Nosotros no estamos pensando nada ahora mismo y, en todo caso, ya no depende de nosotros sino, en este caso, del Ministerio de Educación«, ha concluido.
El Obispado de #Almería dice que «ahora toca cumplir» la sentencia pero mantiene su posición sobre Resurrección Galera https://t.co/pZy5pnGmm3 pic.twitter.com/ykdxRhGKNA
— RTn #Almería (@RTn_almeria) 5 de septiembre de 2018
La postura actual dista mucho de la que en octubre de 2017 planteaba el obispo Adolfo González Montes, quien apuntaba que la diócesis «no está obligado a otorgar» la autorización que «necesitaría» el Ministerio para proceder a la contratación de Galera debido al «principio de laicidad» que establece la «total independencia» de las confesiones religiosas con respecto al Estado en materias que son «propias de su competencia».
En concreto, aseguró «hay sentencias que son imposibles de acatar» y apeló al derecho a la libertad religiosa que garantiza la Constitución Española como «fundamental» para afirmar, tajante, que «nadie me puede obligar a otorgar la venia religiosa para enseñar Religión». «Eso es una violación de los derechos fundamentales y no puedo dar la venia religiosa si realmente no tengo en conciencia el convencimiento de que está dentro de los supuestos de mi propia confesión», añadió.
(RD/Ep)