Lanza el último órdago. El cardenal emérito de Sidney, George Pell, está dispuesto a agotar todas las vías judiciales posibles para demostrar su inocencia.
El que fuera ministro de Economía del Vaticano ha presentado este martes –17 de septiembre de 2019– un recurso de apelación ante el Tribunal Superior de Australia, la máxima instancia judicial del país equiparable al Tribunal Supremo español, contra su condena a seis años de cárcel por abusos sexuales.
Su equipo de abogados ya ha hecho efectiva la entrega de la documentación correspondiente que ahora tiene que ser analizada para ser admitida a trámite.
El purpurado, de 78 años, fue condenado el pasado mes de marzo a seis años de prisión por cinco cargos de abusos sexuales cometidos a dos niños del coro de la catedral de St Patrick’s, en Melbourne, los años 1996 y 1997.
En agosto, el tribunal regional de Victoria desestimó la apelación de Pell que buscaba tumbar la sentencia al cuestionar la veracidad del testimonio de la víctima, única prueba en la que se sostiene el veredicto.
En la cárcel desde febrero, esta decisión confirmó su permanencia en prisión al menos hasta 2022, cuando el ex número 3 del Vaticano podrá solicitar la libertad condicional.
