"Chávez es un loco que dice verdades -porque los locos también dicen algunas verdades- pero ha logrado dividir totalmente el país
(Patricio Downes).-El obispo emérito de Iguazú, Argentina, Joaquín Piña Batllevel, le aconsejó al ex obispo y presidente paraguayo Fernando Lugo que tome distancia de su colega venezolano, Hugo Chávez. «Es un loco que ha fracturado en dos partes a Venezuela», le dijo Piña durante una visita que realizó a Lugo en Asunción, según consigna el diario ABC Color en su edición de este viernes.
Piña es una leyenda religiosa y política en la Argentina pues fue el primero que se animó a enfrentar al creciente autoritarismo de Cristina y Néstor Kirchner, cuando querían hacer reelegir indefinidamente en su cargo a su delfín y gobernador de Misiones, Carlos Rovira.
Piña los derrotó ampliamente, contra todo pronóstico, ya retirado de su diócesis por tener más de 75 años, y encabezando una coalición cívica en esa provincia donde se asentaron poblaciones jesuíticas como San Ignacio, Santa Ana, Concepción de la Sierra y Apóstoles.
Piña es un jesuita español que junto a otro padre de la Compañía de Jesús, Bartolomé Vanrell, fallecido en Cuba, se opuso en Paraguay al dictador Adolfo Stroessner y debió exiliarse en Argentina en los sangrientos años ’70. Fue el primer obispo jesuita en la historia eclesiástica argentina y, ya retirado, reside ahora en la Parroquia de Itatí, en Posadas, capital de Misiones.
«Espero que no sea influenciado por Chávez», dijo monseñor Piña, al opinar sobre el gobierno de Lugo y su inclusión en el «bolivarismo» o socialismo de Siglo XXI de Hugo Chávez.
Soy amigo de Lugo, confesó ante los periodistas. Pero agregó: «Yo, de Hugo Chávez no tengo muy buen concepto. Para mí es un loco que dice verdades -porque los locos también dicen algunas verdades- pero ha logrado dividir totalmente el país. Venezuela es en este momento un país totalmente fracturado en dos partes», analizó el jesuita.
También dijo que tiene mejor concepto de presidentes como Evo Morales, de Bolivia, y Rafael Correa, de Ecuador, entre otros presidentes de América Latina.
En cuanto a Lugo dijo que su imagen le parece aún positiva, a pesar de los escándalos de paternidad que lo envolvieron tras su asunción, recordando que «somos seres humanos».
«Seguramente que habrá afectado en algo su imagen, eso es cierto. Pero hay que mirar las cosas también un poquito desde una perspectiva evangélica. Creo que tenemos que se un poco más humildes, no somos nosotros los que tenemos que juzgar al prójimo. El que nos juzga es Dios, Dios sabe lo que hay en el corazón de cada uno», señaló Piña.