Todos participaban de su círculo de hierro y no dudaban en ayudarlo encubriendo sus terribles abusos
«Los obispos chilenos Andrés Arteaga (Auxiliar de Santiago), Juan Barros (Castrense), Tomislav Koljatic (Linares) y Horacio Valenzuela (Talca) fueron hombres cercanos a Karadima. Lo blindaron y apoyaron siempre, incluso sabiendo de los abusos que cometía. Testigos los veían». Así comienza una carta que escribió Juan Carlos Cruz, una de las víctimas del ex párroco de la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús de calle El Bosque, Fernando Karadima.Lo cuenta El Mostrador de Chile.
En el texto, el periodista que se querelló contra su otrora guía espiritual por abusos deshonestos reiterados, pide firmas para solicitar al Vaticano la remoción de las autoridades eclesiásticas que habrían encubierto al sacerdote.
La misiva, que circula en redes sociales de Internet, ha concitado un amplio apoyo, también de integrantes de la propia iglesia católica, según aseguró Juan Carlos Cruz.
Por su cuenta en Twitter, el profesional agradeció a los «sacerdotes valientes» que firmaron la «carta para remover a obispos encubridores».
Cruz anunció que las firmas serán entregadas el próximo viernes y ya se han reunido más de 1300.
Al justificar la solicitud de remoción, el texto para pedir las firmas de apoyo, asegura que «el obispo Arteaga fue el primero en apoyarlo (a Karadima) públicamente diciendo ‘el querido P. Karadima, tiene toda mi confianza’. El obispo Barros no tuvo problema en destrozar la reputación de una de las víctimas, incluso ayudando a violar el secreto de confesión. El obispo Koljatic participó en oscuros pagos de Karadima a un feligrés de Linares, sabiendo el modus operandi de su director espiritual. Todos participaban de su círculo de hierro y no dudaban en ayudarlo encubriendo sus terribles abusos».
