La romería ha tenido como objetivo despertar la conciencia ecológica para cuidar de las personas y del medio ambiente
(Luis Miguel Modino)- Hablar del río Paraguaçu es hacerlo del principal río que discurre íntegramente por el estado brasileño de Bahía. Con una extensión de 600 km, es uno de los cauces más importantes del nordeste brasileño, región que tradicionalmente se ha visto afectada por sequías periódicas y prolongadas. De sus aguas se benefician más de seis millones de personas que poco a poco experimentan la dificultad que supone que sus recursos hídricos se vean drásticamente disminuidos.
En consecuencia de esto, la diócesis de Ruy Barbosa ha promovido la 8ª Romería Diocesana de la Tierra y las Aguas, que ayer 24 de agosto tuvo lugar en la ciudad de Itaetê, bañada por el Paraguaçu, teniendo como lema: «Cuenca del Paraguaçu, venas que generan vida en Bahia».
Durante varios meses un gran número de voluntarios, que forman parte de las comunidades locales, ayudados por los integrantes de la Comisión Pastoral de la Tierra y las Aguas diocesana, han hecho un gran esfuerzo que ha permitido que este multitudinario evento haya sido realizado con un gran éxito, enfrentando las dificultades que la falta de compromiso de la administración pública local ha provocado, queriendo impedir el éxito de un acontecimiento singular en la región, que pusiese de manifiesto, una vez más, su falta de competencia para resolver los problemas de la población.
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