No es decisión episcopal. Esa es decisión ciudadana. Somos obispos pero también somos ciudadanos y cada quién tiene su conciencia
(Israel González Espinoza, corresponsal en Nicaragua).- Monseñor Silvio José Báez Ortega, OCD, Obispo auxiliar de Managua, pronunció este domingo 6 de noviembre -día de las elecciones generales- una sentida homilía en la que pidió que los nicaragüenses se conviertan en ciudadanos activos para construir una sociedad en la que se respeten los derechos humanos de todos sin excepción y llamó a los feligreses a no olvidar la memoria histórica del país centroamericano.
El día domingo 6 de noviembre, más de cuatro millones de nicaragüenses estaban llamados a las urnas a elegir presidente y vicepresidente, 90 diputados ante la Asamblea Nacional (unicameral) y 20 diputados al Parlamento Centroamericano (PARLACEN, regional), en un proceso electoral que ha estado marcado por las irregularidades y en el que la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) había apelado a la conciencia de cada ciudadano para que ellos decidieran desde su fuero interno si ir o no a las mesas electorales.
«Mientras en Nicaragua, el andamiaje jurídico y político institucional sea ruinoso como lo es actualmente, éste país no va a ir adelante. Hay que construir, y la Iglesia privilegia este sistema social y político. No es el único, ni el mejor, ni siquiera es el más perfecto, la democracia pluralista dónde los ciudadanos tienen cada cierto periodo de tiempo la posibilidad de confirmar o de rechazar y pedir cuentas al gobernante», expresó el Obispo carmelita Báez en una eucaristía celebrada en la Iglesia Nuestra Señora del Carmen, en el antiguo casco urbano de la capital nicaragüense.
El también miembro de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) señaló a renglón seguido que no es un delito pensar distinto, sino una riqueza. Igualmente durante la homilía señaló que no sirve crecer a nivel macroeconómico (Nicaragua crece a un ritmo de 4.0% anual, según datos oficiales), sino se busca un desarrollo humano sustentado en la sostenibilidad y justicia social para que el crecimiento llegue a todos los sectores por igual.
«Hay que despertar la conciencia de ciudadanía que nos ha faltado. Quitarnos de la mente que Nicaragua es ‘del hombre’, del que está arriba, ¡es de todos! Hoy Jesús con éste Evangelio nos demuestra que puede haber momentos oscuros, pero Dios es un Dios de vivos y su reino está llegando a la historia. Ningún momento histórico agota el Reino de Dios y vamos caminando hacia esa plenitud. Esto nos exige, y al mismo tiempo nos consuela y nos llena de esperanza. ¡A sonreír, a rezar, a confiar en el Señor, en la nobleza de nuestro pueblo y asumir todos la responsabilidad de construir un mejor futuro para nuestro país», finalizó Báez la homilía, que fue aplaudida por los feligreses que atiborraban la iglesia.
Al finalizar la eucaristía, Monseñor Báez atendió a periodistas de diversos medios de comunicación entre ellos Religión Digital, a los que explicó su decisión de no asistir a votar durante los comicios por «responsabilidad» y por un compromiso para una Nicaragua mejor.
«Este proceso electoral lo he analizado, lo he seguido en detalle, me he interesado. Este domingo he tomado mi decisión, que ha sido de superación de la indiferencia, no he ido a depositar mi boleta a ningún centro electoral y no por abstencionismo, sino por responsabilidad y por amor a Nicaragua. No me he fijado solo en este proceso, sino en toda la historia reciente de Nicaragua y para mí el problema no es el proceso electoral, porque este proceso electoral es hijo de un sistema viciado de raíz, autoritario y antidemocrático. En conciencia yo no podía prestarme a ir a ser parte de un juego que considero que no respeta la voluntad de los nicaragüenses y que no le trae ningún bien a Nicaragua», expresó el Obispo.
También puntualizó que el estado de la democracia no se mide a partir de los votos que se cuentan el día de las elecciones, al mismo tiempo que manifestó que el no asistir a las urnas lo compromete más como ciudadano y como Obispo.
«El no ir a votar para mí hoy es un compromiso muy grande, yo me comprometo hoy por Nicaragua, a construir un país mejor desde mi ser de ciudadano y de obispo, mi palabra profética, mi cercanía a los pobres, mi vida de austeridad, para que este país salga adelante, en justicia social y respeto a los derechos humanos, eso es lo que me ha hecho hoy abstenerme de echar una boleta en una caja, pero no he dejado de votar por el futuro de Nicaragua», expresó Monseñor Báez.
Otros obispos del país se unieron al Obispo Báez en su decisión de abstenerse de asistir a las mesas electorales a depositar el voto, como fue el caso de Monseñor Juan Abelardo Mata (Estelí) y Monseñor Carlos Herrera, OFM (Jinotega).
«Está a la vista de todos que este no ha sido un proceso electoral transparente como los anteriores y ahora peor, este ha sido un poco el colmo, y pues hemos visto que la afluencia de ir a votar ha sido muy poca, pasará lo que ya la gente pensaba, una continuidad del gobierno anterior, la gente lo ha tomado así y también nosotros, no le quisimos dar publicidad, a lo que ya estaba programado desde antes de las elecciones» manifestó monseñor Herrera.
Por su parte, monseñor Mata aseguró que no fue a votar porque no iba a avalar situaciones injustas. «Es un proceso que es ilegal a toda vista y que no va a llevar al desarrollo de la nación».
En tanto, los Obispos Jorge Solórzano Pérez (Granada) y Rolando Álvarez Lagos (Matagalpa) destacaron la baja participación de la población en los comicios de éste domingo.
«Pero si ya el pueblo está descontento y se abstiene masivamente es una señal que nos puede marcar, que hay un malestar», aseguró Solórzano al diario La Prensa de Managua.
«Yo lo que veo es un día común y corriente, aquí yo veo que toda la gente anda haciendo su vida normal, como cualquier otro día», manifestó el Obispo Álvarez, uno de los obispos más críticos al proceso electoral.
Obispos Brenes y Vivas Robelo sí votaron
En contraste con la decisión de alguno de sus hermanos en el Episcopado, el arzobispo de Managua y presidente de la CEN, cardenal Leopoldo Brenes Solórzano, llegó en horas de la mañana a su centro electoral para depositar su voto en compañía de sus familiares y una batería de periodistas, la mayoría de medios afines al gobierno.
«Dentro de mis reflexiones estaba cómo podemos cambiar a las autoridades y prácticamente solo podemos a través de las elecciones. Pienso que las elecciones y el diálogo son importantes, pero diálogo, dice el Santo Padre, no es imponer ideas sino proponer mi pensamiento y escuchar», declaró Brenes Solórzano tras salir de la mesa electoral en dónde le toca votar.
Otro que también acudió a las urnas fue el obispo de León y vicepresidente de la CEN, Bosco Vivas. Según el prelado, votó porque lo considera «su responsabilidad» porque según Él, aporta «algo» al bienestar de Nicaragua.
«Aunque nos parezca que es una gota de agua en un mar, sin embargo como decía la santa madre Teresa de Calcuta, si la gota le falta al mar, algo le falta, por lo tanto esa gota que nos toca a nosotros poner para el bien común hay que ponerla», expresó Vivas Robelo, quién el próximo 14 de noviembre deberá presentar al Papa su renuncia al cumplir los 75 años de edad como mandata el Derecho Canónico.
A la pregunta de Religión Digital sobre si la disparidad en las decisiones de los Obispos de Nicaragua de asistir o no a las urnas influía en la comunión episcopal, Monseñor Báez aseguró que cada prelado escogió a conciencia como ciudadanos y no como Iglesia.
«No es decisión episcopal. Esa es decisión ciudadana. Somos obispos pero también somos ciudadanos y cada quién tiene su conciencia, y en esto, también entre los obispos nos respetamos, y hay quién tome una decisión, y hay quién tomen otra. Lo importante es que como Conferencia Episcopal estaremos siempre acompañando al pueblo de Nicaragua como una voz profética, como una voz de consuelo, como una voz que ilumine desde la fe y la doctrina social de la Iglesia».
Desarrollo de los comicios
Los comicios generales del 6 de noviembre se celebraron en una relativa calma, y con un marcado declive en la participación ciudadana.
Según los cálculos de organismos opositoras, tales como Frente Amplio por la Democracia (FAD) y Ciudadanos por la Libertad (CxL), la abstención rondó el 70%. Ambas organizaciones formaban parte de la denominada Coalición Nacional por la Democracia (CND) que agrupaba al grueso de la oposición que quedó inhibido de la participación en la justa electoral debido a un fallo judicial polémico que les quitó la casilla en la que irían a los comicios.
Sin embargo, para el Consejo Supremo Electoral (CSE, poder del Estado encargado de los procesos electorales) en palabras de su presidente Roberto Rivas Reyes, la participación ciudadana en los comicios fue del 65,3% y la abstención fue del 34,7%.
En horas de la madrugada (hora de Managua), con el 66,3% de las mesas escrutadas, el CSE manifestó que la tendencia ganadora irreversible del 72% era para el gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN, izquierda) con sus candidatos Daniel Ortega y Rosario Murillo como presidente y vicepresidente respectivamente.
De ratificarse la tendencia al final del conteo del 100% de mesas electorales, Ortega habría ganado un nuevo mandato de cinco años en Nicaragua, convirtiéndose en el presidente que más tiempo ha gobernado desde el retorno de la democracia al país en 1990. También los resultados le darían hegemonía en la Asamblea Nacional (unicameral) y una amplia representatividad en el Parlamento Centroamericano.
En orden descendente, y muy lejos del FSLN, quedaba el Partido Liberal Constitucionalista PLC, derecha) con un 14%, Partido Conservador, 3%, Partido Liberal Independiente (PLI) con 5%, Alianza Liberal Nicaragüense con 5% y Alianza por la República con 2%.
«Agradecemos a nuestro pueblo haber participado en este fiesta cívica, nuevamente nuestro agradecimiento a quienes nos han acompañado en esta jornada y de quienes esperamos, sobre todo los expertos, un informe el día de mañana, después de las 11 de la mañana después de que nosotros ya demos el informe final», expresó Roberto Rivas, presidente del CSE al terminar la comparecencia pública ante los medios de comunicación.