En lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto 15 curas fueron asesinados, de acuerdo con el informe 2016 del Centro Católico Multimedial
Un cóctel molotov ha estallado en la sede de la Conferencia Episcopal mexicana, según ha informado el episcopado en un comunicado. El ataque a las instalaciones causó graves daños materiales en la puerta principal, aunque no se registraron heridos.
En el comunicado difundido por redes sociales, la Conferencia del Episcopado Mexicano dijo que la detonación ocurrió alrededor de las 1:50 horas «sin que ninguna persona resultara dañada».
El Episcopado agregó que se están realizando las averiguaciones pertinentes. También denunció que no se trata de un hecho aislado, pues en otras ocaciones se han sufrido atentados, aunque no especificó si con instrumentos explosivos.
Monseñor Ramón Castro escribió a través de su cuenta de Twitter que el ataque fue con bomba molotov de tres cilindros y agregó que «eso refleja la situación de México».
Junio se convirtió en el mes más violento de la administración de Enrique Peña Nieto con 2 mil 234 homicidios dolosos registrados ante el Ministerio Público, de acuerdo con cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Nota informativa sobre el incidente en la sede de la Secretaria General de la #CEM por la madrugada del día de hoy. @MexicoChurch pic.twitter.com/0MHynoibsK
— CEM (@IglesiaMexico) 25 de julio de 2017
El sexto mes de 2017 también se posicionó como el más sangriento de los últimos 20 años, lapso en que el Secretariado comenzó a realizar estadísticas de la incidencia delictiva registrada en los estados de la República Mexicana.
La inseguridad también ha escalado a los grupos religiosos ubicando a México como el país latinoamericano más peligroso para ejercer el ministerio sacerdotal. En lo que va del sexenio de Enrique Peña Nieto 15 curas fueron asesinados, de acuerdo con el informe 2016 del Centro Católico Multimedial.
El documento «Tragedia y crisol del sacerdocio en México» precisó que de 2012 a 2016 se registraron en total 25 atentados contra miembros de la Iglesia católica. En 15 de esos casos fueron asesinados los sacerdotes, aparte del homicidio de un seminarista y cinco laicos católicos, además de la desaparición de dos presbíteros y el secuestro frustrado de dos sacerdotes ya mencionados.