Monseñor Thevenin se ha distinguido por su cercanía a todos los sectores sociales del país y por su acertada actitud de humanismo y construcción de la paz
(C. Doody).- Los obispos de Guatemala han salido en defensa del nuncio apostólico en el país, Nicolás Thevenin. Y eso después de que el diario La Hora le acusara de haber organizado en la Nunciatura un reunión de empresarios en la que el presidente Jimmy Morales comunicó su intención de expulsar del país al jefe de la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala, Iván Velázquez, y de esta forma poner pegas a la lucha contra la corrupción.
Mensaje de la Conferencia Episcopal de Guatemala en la situación actual de Guatemala
Los obispos de Guatemala, a la feligresía católica, a los hermanos y hermanas de las diversas confesiones religiosas, a los miembros del Gobierno de Guatemala y a los diversos sectores de la sociedad civil, así como a las diversas representaciones diplomáticas en Guatemala, manifestamos:
1) Nuestra preocupación por toda confrontación política e ideológica en torno a los sucesos que implican a la Presidencia de la República, a la Comisión Internacional contra la Impunidad, así como a la Corte de Constitucionalidad y a otros muchos organismos de Estado y de la sociedad. Pedimos a todos una actitud de diálogo y no de desautorización del otro. Como guatemaltecos y guatemaltecas estamos llamados a vivir la fraternidad basada en la justicia y en el espíritu de reconciliación.
2) Nuestra profunda indignación por las acusaciones infundadas esparcidas impunemente por un diario vespertino contra la persona de Monseñor Nicolás Thevenin, Nuncio Apostólico en Guatemala y Decano del Cuerpo Diplomático. Monseñor Thevenin se ha distinguido por su cercanía a todos los sectores sociales del país y por su acertada actitud de humanismo y construcción de la paz. Por ello, aparte de injustas y perniciosas, merecedoras de un proceso por difamación, dichas afirmaciones son tendenciosas y atentatorias a la paz y a la imagen internacional de Guatemala como un país que acoge la presencia y colaboración de naciones hermanas en todos los órdenes de la vida nacional.
Pedimos a Dios nuestro Señor, que este mes de la Patria sea ocasión de reflexión y de conversión de actitudes radicalizadas, para dar paso a la construcción del bien común y superación de tantos males sociales que aquejan esta tierra hermosa y de hijos nobles. Que el Señor nos bendiga con la anhelada paz social, y que dejando los ídolos del poder y de la calumnia, podamos decir: «Dichoso el pueblo cuyo Dios es el Señor» (Salmo 144, 15).
– Monseñor Gonzalo de Villa y Vásquez sj
Presidente de la Conferencia Episcopal de Guatemala
Guatemala, 2 de septiembre de 2017