Presentamos nuestras sentidas condolencias a los familiares... y pedimos al pueblo colombiano que, aun en medio del dolor y la adversidad, se mantenga la cordura y la esperanza
La Conferencia Episcopal de Colombia rechazó y expresó su consternación por el asesinato de siete campesinos en el Cauca, así como el de dos líderes sociales, uno en Chocó y otro en Atlántico.
A través de una carta la Iglesia católica condenó la masacre que acabó con la vida de siete personas, dos de ellas, disidentes de las Farc, registrada en el municipio de Argelia, en el departamento del Cauca.
En la misiva, la Conferencia Episcopal, también condena los homicidios de dos líderes sociales y comunales en los departamentos de Chocó y Atlántico.
«Como pastores, lamentamos estas violaciones del derecho a la vida que significan, al mismo tiempo, un abominable y repudiable quebrantamiento de las leyes sagradas del Creador, único dueño de la vida. Estos hechos no contribuyen a la construcción de una auténtica reconciliación y paz que buscamos los colombianos», detalla el oficio.
Según las autoridades, una interceptación radiofónica, es la principal prueba para imputar la responsabilidad de la masacre en el Cauca al frente José María Becerra del ELN.
Por su parte, dicha guerrilla, niega su intervención en dicha acción violenta que terminó con la vida de las siete personas.
Mientras tanto Medicina Legal adelanta los trámites forenses para entregar los cuerpos a los familiares en Popayán, que aseguran que al menos tres de las víctimas, no tenían nada que ver con las Farc.
(RD/RCN)