El último intento de diálogo entre Gobierno y oposición en Venezuela fracasó en febrero pasado, cuando la delegación opositora se negó a firmar un acuerdo por considerar que no incluía varias de las exigencias del antichavismo
El monseñor Mario Moronta, obispo de la ciudad de San Cristóbal (oeste de Venezuela), opinó hoy que tanto a la Iglesia católica como al Gobierno les ha faltado «tender puentes seguros de encuentro» para sobrellevar la crisis que atraviesa el país.
En declaraciones al canal privado Globovisión, Moronta reiteró la importancia del diálogo entre los distintos sectores, aunque precisó que no consiste en «aceptar lo que tú dices o lo que yo digo, sino compartir las dificultades (…) y sobre todo la búsqueda de ayudas para la gente».
«Necesitamos diálogo con representantes y acompañantes (…), pero también una representación popular, no se trata solo de que las cúpulas decidan por la gente», dijo el obispo.
Señaló la necesidad de romper paradigmas y de que el Ejecutivo «tenga mayor apertura con la gente», pues, recordó, al igual que la Iglesia, la vocación de un gobierno debe ser de servicio.
Se refirió a la nueva coalición opositora llamada Frente Amplio y consideró que en esta alianza, a la que calificó de «pacto de élites», «falta mucha gente» porque, a su juicio, «no está representada la gente de pueblo».
El último intento de diálogo entre Gobierno y oposición en Venezuela fracasó en febrero pasado, cuando la delegación opositora se negó a firmar un acuerdo por considerar que no incluía varias de las exigencias del antichavismo.
La Iglesia católica y el Gobierno venezolano mantienen relaciones tensas desde la llegada al poder de Hugo Chávez en 1999, que manifestó desde sus inicios sus desacuerdos con la institución religiosa, un punto de vista que comparte su sucesor y actual presidente, Nicolás Maduro.
Los obispos venezolanos, por su parte, han hecho reiteradas críticas a los gobiernos chavistas y les han exigido que abran un canal humanitario para que al país entren medicamentos y ayuda sanitaria en general.
La Iglesia venezolana ha hecho reiterados llamamientos a la unidad y ha dicho que «nunca se negará a un diálogo», siempre que tenga las características que definen el proceso de conversaciones.
(RD/Agencias)