L elección es clara: ¡es la ‘del sí' incondicional al Evangelio de la vida!
«Desconocer, despreciar, maltratar y eliminar la vida física del hombre, sea cual sea el momento y la situación en que se encuentre desde el instante de su concepción hasta el momento de su muerte natural, implica el desprecio, el rechazo y la destrucción del don de la vida en su totalidad. Significa rechazar a Cristo, el Autor de la nueva vida. Una cruel versión contemporánea del pecado de origen. Una radicalización suma del no a Dios, de la rebelión contra Él». Con esta contundencia, el cardenal de Madrid, Antonio María Rouco, ha denunciado esta noche los ataques contra la vida en la sociedad actual.
Durante su homilía en la Vigilia de la Inmaculada, que se está celebrando en estos momentos en la catedral de La Almudena, Rouco Varela se ha preguntado «¿qué puede resultar para el futuro de una sociedad que acepta el aborto y lo facilita, que se deja inclinar por la pendiente inhumana e inmoral de la eutanasia, sino el de devenir una mal llamada civilización donde triunfa la muerte en todas sus variantes?»
Parafraseando a Juan Pablo II, Rouco Varela incidió en que «para el hombre y la sociedad contemporáneas no hay nada más que una alternativa: la del Evangelio de la vida, del respeto y cuidado del don de la vida inviolable y sagrada y de la consiguiente ‘civilización del amor’, o la de la cultura y civilización de la muerte y de la muerte del amor».
Para un cristiano, añadió, «la elección es clara: ¡es la ‘del sí’ incondicional al Evangelio de la vida!«. Con motivo de la festividad de la Inmaculada Concepción, que se celebra este martes, el cardenal de Madrid recuerda que «este año 2009, inmerso en una profunda situación crítica no sólo económica sino también cultural, moral y religiosa, reclama de los cristianos, especialmente de los jóvenes y de las familias: primero, un serio, consecuente y valiente compromiso por la vida».
Junto a la de La Almudena, en toda España e Iberoamérica se celebraron vigilias de oración, bajo el lema «María, Reina y Madre de Misericordia«. En las tres que se celebraron en la capital de España (Almudena, Basílica de la Merced y el Santuario de María Auxiliadora) se puso especial énfasis en la preparación de la Jornada Mundial de la Juventud de 2011, que contará con la presencia de Benedicto XVI.
Precisamente, el Papa envió un mensaje de aliento y su Bendición Apostólica para los asistentes y organizadores que se leyó con fuerte emoción en las mismas Vigilias. Es de resaltar que, desde siempre, los organizadores se ayudan en sus trabajos con las oraciones y sacrificios de más de 700 conventos de almas contemplativas de España.