Con la asistencia de nueve obispos y cien sacerdotes

Un millar de fieles despide en catedral de León a Vilaplana

Julián López llama a "actualizar su legado" durante la Misa Exequial

Un millar de fieles despide en catedral de León a Vilaplana
El féretro de Antonio Vilaplana, en la catedral de León

Oyentes primero, para poder más tarde llegar a ser testigos

Un millar de fieles ha despedido este mediodía en la catedral de León a su obispo emérito, Antonio Vilaplana, fallecido esta semana. La capilla ardiente, instalada desde primera hora de la mañana en el Palacio Episcopal, ha registrado una continua afluencia de gente, hasta que se han trasladado los restos mortales a la catedral.

A las 12.30 horas los Cabildos Catedral y Colegial junto con unos algunos de los jóvenes sacerdotes ordenados por Vilaplana han trasladado el féretro desde el Palacio Episcopal hasta la seo leonesa donde a las 13.00 horas ha comenzado la Misa Exequial, que han concelebrado nueve obispos y cerca de un centenar de sacerdotes.

En concreto, han participado el arzobispo emérito de Oviedo, Gabino Díaz Merchán; el obispo Administrador de Oviedo, Raúl Berzosa Martínez; el arzobispo de Burgos, Francisco Gil Hellín; el obispo auxiliar de Valencia, Enrique Benavent Vidal; el obispo de Plasencia, Amadeo Rodríguez Magro; el obispo de Astorga, Camilo Lorenzo; el de Santander, Vicente Jiménez Zamora; y el de Ciudad Rodrigo (Salamanca), Amadeo Rodríguez Martínez, además del obispo de León, Julián López.

En su homilía, Julián López ha calificado a Antonio Vilaplana de un «fiel servidor» y ha recordado como solía advertir a los sacerdotes de que «no somos dueños de esta palabra que nos ha sido confiada, sino oyentes primero, para poder más tarde llegar a ser testigos«.

Su muerte, sucedida el jueves en Valencia, ha proseguido, constituye un motivo para «actualizar su legado«, por ello, ha anunciado que se renovará el compromiso de la Iglesia Legionense de continuar la aplicación de las Constituciones Sinodales del Sínodo diocesano de 1993-1995.

A continuación, ha tenido lugar el traslado del cuerpo hasta la capilla penitencial custodiado por la familia, obispos, cabildo de la Catedral y sacerdotes ordenados por el que fuera prelado de la diócesis leonesa, que han portado el féretro para su inhumación.

Posteriormente, antes de la bendición final se ha procedido a dar lectura a una carta de la Nunciatura Apostólica que transmitía las condolencias personales del Papa Benedicto XVI y de su secretario de Estado, el cardenal Tarsicio Bertone.

Para concluir, el obispo ha pronunciado la Acción de Gracias, y ha impartido la bendición final tras la que se ha entonado el Himno a la Virgen del Camino.

A la ceremonia han asistido diversas autoridades civiles y militares, entre ellos el vicealcalde de León, Javier Chamorro, y el subdelegado de Gobierno en León, Francisco Álvarez.

Monseñor Antonio Vilaplana, obispo emérito de León y pastor de esta diócesis durante quince años (1987-2002), falleció el 14 de enero en Valencia a causa de una insuficiencia renal.

Nacido en Alcoy (Alicante) el 28 de febrero de 1926, fue ordenado sacerdote el 18 de diciembre de 1949, después de haber cursado los estudios eclesiásticos en el Seminario Conciliar de Valencia.

Fue canónigo magistral de la catedral de Valencia y obispo en la diócesis de Coria-Plasencia (Cáceres) en 1976, donde permaneció hasta 1987, cuando fue nombrado obispo de León.

Además, presidió la Comisión Episcopal para la Doctrina de la Fe y de Patrimonio Cultural y también la Comisión Teológica del VIII Congreso Eucarístico Nacional en Valencia.

(RD/Efe)

 

CONTRIBUYE CON PERIODISTA DIGITAL

QUEREMOS SEGUIR SIENDO UN MEDIO DE COMUNICACIÓN LIBRE

Buscamos personas comprometidas que nos apoyen

COLABORA
Autor

Jesús Bastante

Escritor, periodista y maratoniano. Es subdirector de Religión Digital.

Lo más leído