No se descarta que, antes del 5 de febrero, Alfredo Dagnino retire su candidatura
(José Manuel Vidal).- La Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) ha decidido volver a votar el próximo 5 de febrero, tras el empate a 125 votos que el pasado martes, 7 de diciembre, obtuvieron los aspirantes Carlos Romero y Alfredo Dagnino. Éste último fue el claro derrotado moral de los comicios y, por lo tanto, presidente saliente de la institución.
Aún faltando por contabilizar cuatro votos por correo, se ha optado por esta salida con el fin de dar tiempo a Alfredo Dagnino a tomar una decisión adecuada sobre su futuro.
Precisamente, el desánimo en la candidatura de Dagnino se ha visto aumentado ante la verificación de que los cuatro votos por correo que no han llegado de Barcelona pertenecen a Carlos Romero.
Aún así, la candidatura de Romero ha aceptado repetir la votación, movida por el ánimo de encontrar una solución adecuada tanto para la institución como personalmente para el presidente saliente.
Eso sí, con condiciones. Por ejemplo, los partidarios de Carlos Romero exigieron que, para poder repetir la votación, ambos aspirantes tengan los mismos recursos a su disposición. Hasta ahora la candidatura de Alfredo Dagnino ha tenido todos los instrumentos a su alcance por parte de la ACdP, a diferencia de la del aspirante, que se ha tenido que costear personalmente su candidatura, que gana simpatías a un ritmo acelerado.
La nota más destacada de los comicios celebrados el martes ha sido que todos los aspirantes a los diferentes órganos partidarios de Romero han salido elegidos, frente al fracaso estrepitoso de los aspirantes propiciados por Dagnino.
En ese sentido, como se sabe, ha sido elegido patrono de la Fundación Juan Bover, por lo que la mayoría ya existente en esta institución de los partidarios de Romero se amplía aún más.
De la misma manera han sido electos como miembros del Consejo Nacional, Hipólito Velasco y Francisco Bustos, ambos personas muy cercanas a Carlos Romero, por lo que aquella ventaja por un solo voto de Alfredo Dagnino en dicho órgano pasa a ser favorable, también por un solo voto, a Romero.
Quedan, pues, constituidos el Consejo Nacional y la Fundación, con una clara mayoría de Carlos Romero, al que sólo le falta ser ratificado como presidente entrante de la ACdP.
Los partidarios de Alfredo Dagnino reconocen «una clara victoria moral de Carlos Romero, a quien felicitamos, teniendo en cuenta que ha carecido de todos los medios necesarios para exponer su programa».
Para los antiguos partidarios de Dagnino, «se hace muy difícil que Alfredo pueda ser reelegido el próximo 5 de febrero dado que si así fuera, contaría con la oposición tanto de la mayoría del Consejo como de la mayoría de la Fundación, situación paradójica que haría ingobernable la institución«.
Por este motivo, así como por las enormes simpatías que suscita el aspirante, desde la candidatura de Alfredo Dagnino han ido incorporándose a la de Carlos Romero durante estas últimas horas numerosas adhesiones.
En defensa de la institución, confiando en la valía de Romero como gestor y propagandista, son ya muchos los que, habiendo votado por Alfredo Dagnino, se decantan en estos momentos por el más que probable nuevo presidente.
Por estos motivos no se descarta que, antes del 5 de febrero, Alfredo Dagnino retire su candidatura. Fuentes consultadas le dan a esta posibilidad el máximo de probabilidades, habida cuenta de la fuerte oposición que en todos los órganos suscita el ya expresidente de la ACdP.
La razón por la que se ha postpuesto la resolución de las elecciones hasta una fecha tan lejana se debe a la conincidencia con las fiestas navideñas. Aún así, cabiendo la posibilidad de que Dagnino retire su candidatura, habida cuenta de las nuevas adhesiones y de las mayorías en el Consejo Nacional y en la Fundación, todos dan por hecho que el próximo presidente de la ACdP será Carlos Romero, tanto si se vota como si queda como único aspirante.
Fuentes del Arzobispado han confirmado su satisfacción porque un hombre como Carlos Romero, de dilatada experiencia en apostolado y gestión, pueda hacerse cargo de esta centenaria institución.