El secretario general de UGT, Cándido Méndez, ha reconocido que «si la patronal está en disposición» desde su sindicato están «dispuestos por la vía del diálogo social a desarrollar aquellos aspectos que hay que desarrollar».
Méndez ha asegurado que lo que hay que tener en cuenta es que el decreto ley del Gobierno «cambia los contenidos de los convenios colectivos» y por lo tanto, a partir de su entrada en vigor y «manteniendo» sus «diferencias con él», saben que va a ser «una referencia porque así lo indica, que no el marco legal, en los convenios colectivos».
Asimismo, ha dicho que como este decreto ley «obliga a la negociación colectiva a incorporar nuevos contenidos» procurarán «que en los convenios colectivos estos contenidos se desarrollen en términos de equilibro para preservar los derechos de los trabajadores».
Además, ha apostillado que posteriormente tras su entrada en vigor «habrá que tramitarlo en debate parlamentario». Ahí será cuando UGT hable «con los grupos parlamentarios para que este decreto no sufra alteraciones que puedan hacer más difíciles a los trabajadores sus cometidos» por lo que anunció que próximamente remitirán «una solicitud a los grupos políticos».
Méndez ha efectuado estas declaraciones en un encuentro con la prensa tras participar en Barcarrota (Badajoz) en la inauguración de un Centro Infantil que lleva el nombre de su padre.
DESEQUILIBRIOS A FAVOR DE LA PATRONAL
No obstante, Cándido Méndez, ha criticado que en relación a lo que habían «negociado» los sindicatos con la patronal, en el documento aprobado hoy por el Gobierno se pone de manifiesto que el Ejecutivo se «ha desequilibrado hacia la patronal» algunos aspectos, por lo que instarán además a que se «procure buscar un punto de equilibrio» en los mismos.
Pregunto por cuáles serían estos desequilibrios, ha respondido que es algo «muy evidente» en lo referente a «una mayor discrecionalidad de los empresarios para hacer convenios de empresa o una mayor discrecionalidad para alterar la distribución de la jornada laboral» de los trabajadores, puesto que según ha recalcado «en estos aspectos el Gobierno no ha respetado el equilibrio de las conversaciones».
Por otro lado, Méndez ha subrayado que es «muy importante» el hecho de que el Ejecutivo «acepte que los convenios no van a perder su vigencia», puesto que «se mantiene la vigencia» de aquellos en los que no «hubiera un resultado positivo en la negociación».
Del mismo modo, ha destacado que la nueva reforma «articula el procedimiento que hay de mediación de arbitraje» que, según ha recordado, los sindicatos «ya» ofrecieron «a la patronal» durante las negociaciones que se mantuvieron antes de la ruptura del diálogo social.
«Este es un tema en el que se mantiene el equilibrio, pero en el resto de los temas donde no se mantienen equilibrios y se ha pretendido beneficiar a las empresas aunque los empresarios no lo reconozcan, nosotros queremos esta parte que está desequilibrada volverla a un equilibrio necesario», ha advertido.
PENDIENTES DE NEGOCIACIONES
Respecto a emprender diálogo con la patronal, ha indicado que con la CEOE tienen «pendientes negociaciones» y por lo tanto las van «a seguir desarrollando», ya que además según ha reconocido en «este decreto hay temas que necesariamente hay que negociar» con los empresarios.
Preguntado por la nueva regulación para los expedientes de regulación de empleo aprobada también hoy en el Consejo de Ministros aceptando la previsión de pérdidas transitorias como motivo para el despido, ha reconocido «no» conocer «exactamente lo que ha podido hacer el Gobierno» en esta materia.
INICIATIVA CONTRA LA REFORMA LABORAL
Sin embargo, ha adelantado que «precisamente la próxima semana» registrarán «una iniciativa legislativa popular» ante el Congreso de los diputados «para cambiar la reforma laboral» en la que, a su juicio, «el Gobierno cometió errores de un gran calibre » y uno de ellos, según recalcó «fue el facilitar el despido de los trabajadores a través de una condición tan subjetiva, que depende básicamente del empresario» pues es quien «puede prever o no pérdidas en relación con el funcionamiento de la empresa» como censuró.
Para concluir, Méndez ha observado que «parece ser que» se «ha hecho algún cambio en esa materia» y «si ese cambio ha sido para darle una cierta o mayor objetividad a un disparate que habían hecho en la reforma laboral» entonces será «bueno para corregir, auque sea de manera claramente insuficiente, el disparate en términos económicos y socio laborales» que ha supuesto la nueva reforma laboral, ha valorado.
