Los atentados de los insurgentes afganos contra los aliados disminuyeron en los meses de mayo y junio por primera vez desde 2006, a pesar de que tradicionalmente la ofensiva guerrillera se recrudece cuando llega el buen tiempo.
La ministra de Defensa, Carme Chacón, trasladó este dato de un informe del general en jefe de las tropas aliadas, David Petraeus, en su comparecencia ante la Comisión del ramo del Congreso de los Diputados para dar cuenta del atentado que sufrió un blindado español el pasado 26 de junio, a resultas del cual fallecieron dos militares desplegados en Afganistán.
En su réplica a los distintos portavoces parlamentarios, Chacón reveló también que este mes de julio el Gobierno afgano tendrá ya en sus manos la responsabilidad de la seguridad en siete provincias del país, que aglutinan la cuarta parte de la población.
Además, en esa segunda intervención la ministra quiso recalcar que la llegada del Gobierno de Barack Obama a la Casa Blanca ha supuesto «un antes y un después» por lo que respecta a la fijación de objetivos «realistas» y plazos «irrenunciables» de retirada de las fuerzas occidentales. Según Chacón, «estamos hablando de realidades», y aunque seguirá habiendo «riesgos a diario», hay que subrayar que «los progresos existen».
Ejemplos de ello serían que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado afgano ya tienen preparados 300.000 de los 350.000 efectivos que requieren, que 56 batallones ya pueden actuar sin más ayuda occidental que en el asesoramiento y que, en la provincia de Baghdis, asignada a España, más de 800 insurgentes han entregado las armas.
Sobre las preguntas más vinculadas a España que le dirigieron los portavoces, Chacón explicó que aún se está investigando si la bomba que estalló al paso del blindado el 26 de junio se activó por radiofrecuencia, por presión «o por ambos», que también sería posible.
Igualmente, defendió que no es precisa la autorización del Parlamento al envío de nuevos efectivos del Cuartel de Alta Disponibilidad de la OTAN en Bétera (Valencia) porque se trata de un mero relevo de fuerzas ya comprometidas con la Alianza Atlántica y la UE; y negó que los soldados españoles vayan a ser los últimos en abandonar Afganistán porque todos los países están compelidos por los plazos marcados por la OTAN en la cumbre de Lisboa (2009) y por los índices de seguridad de los territorios que tienen encomendados.
PORTAVOCES
Así contestó la ministra a los portavoces que intervinieron, que fueron Beatriz Rodríguez Salmones por el PP, María Concepció Tarruella por CiU, José Ramón Beloki por el PNV, Gaspar Llamazares por IU-ICV-ERC, Rosa Díez por UPyD y Jesús Cuadrado por el PSOE.
Rodríguez Salmones dijo que no le salen las cuentas del binomio de mantener la seguridad y marcharse en 2014 y que no le gustaría equivocarse en la decisión, y abogó por dar a los familiares de los soldados muertos, no sólo apoyo toda la vida, sino un sentido que explique esas pérdidas. También se interesó por los inhibidores de radiofrecuencias, puesto que la bomba pudo accionarse a distancia. Tarruella y Beloki se interesaron ante todo por las medidas de seguridad de los soldados en «misiones internacionales cada vez más complejas».
Llamazares, por su parte, afirmó que él nunca creyó que esta guerra se pudiera ganar, siendo el Estado afgano insostenible y su Gobierno corrupto. �Sólo queda ver la fecha en que nos vamos�, sentenció, lamentando que el calendario se establezca de acuerdo con los intereses electorales de Obama y que los militares españoles queden como �los últimos para apagar luz en Afganistán�.
Rosa Díez detectó una contradiccion entre marcharse al dar por cumplida la misión y hacerlo en una fecha prevista de antemano, y lamentó que esto último es �darle la victoria al enemigo�. De hecho, su diagnóstico es funesto: �Hay que decir que hemos perdido. Hemos renunciado a ganar y hemos perdido�. Con críticas veladas a Obama, dijo que ahora ya sólo se trata de ver cómo nos vamos y que, si no se ha querido derrotar a los talibanes, lo único que queda es proteger a los soldados.
Finalmente, desde el PSOE, Cuadrado ensalzó el �éxito espectacular� de la OTAN en Afganistán, al permitir a su Gobierno afgano hacer retroceder al terrorismo e, indirectamente, proteger la seguridad de los españoles. Sobre la fecha de retirada, aclaró que la fecha de 2014 la puso precisamente el Ejecutivo de Kabul, al considerar que ya está preparado, y que se hará siempre vigilando los 30 criterios estrictos que ha puesto la OTAN para permitir la retirada.
