El gesto es criticado por los partidos de la oposición, que opinan que «hurta el mérito» a la Policía
Con el ladrón ya entre rejas, el Códice Calixtino regresa esta mañana a manos del arzobispo de Santiago, Julián Barrio. Mariano Rajoy viajará desde Madrid para ser testigo del momento, signo de «la importancia que el Gobierno le da al Camino de Santiago», según aseguró ayer el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo.
El aviso de la desaparición de la pieza se dio el 5 de julio de 2011. Este miércoles aparecía en un garaje utilizado como trastero y desde entonces se ha custodiado en dependencias policiales. Hoy Rajoy se lo devolverá a la máxima autoridad religiosa de la diócesis compostelana en un acto que comenzará a las 10.15 horas en la sala Sinodal del Palacio de Xelmírez.
Feijóo considera que «la presencia del presidente del Gobierno resalta la importancia del Camino de Santiago y de Galicia en toda la cultura europea desde el Medievo». El jefe de la Xunta indicó que Rajoy «viene a testimoniar el trabajo de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado» para recuperar una joya del patrimonio no solo gallego, sino español y europeo, afirmó. El gesto es criticado por los partidos de la oposición, que opinan que «hurta el mérito» a la Policía. Rajoy y Feijóo estarán acompañados por otras autoridades como la presidenta del Parlamento gallego, Pilar Rojo, o el conselleiro de Cultura, Jesús Vázquez.
También estará el deán de la catedral, José María Díaz, archivero en el momento de la sustracción y quizá quien más haya sufrido con la desaparición. Tras el desenlace afortunado del caso, ha afirmado a Efe que no dirá «dónde se va a guardar ahora el Códice. No debería ser de dominio público el lugar». Se prevé que en los próximos meses sea expuesto y la Xunta ya ha expresado al cabildo y al arzobispado la necesidad de establecer medidas de seguridad más efectivas, para lo que Feijóo ha comprometido la ayuda de su administración. Mientras tanto, hoy se colocará en un expositor del Palacio de Xelmírez.
(Rd/Agencias)