El párroco pasó a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Albacete, que decretó el secreto de sumario sobre la causa
El párroco de las localidades albaceteñas de Alatoz y Carcelén, Mario Manuel O.G., de nacionalkidad boliviana, se encuentra en libertad tras haber sido detenido por la Guardia Civil por su posible vinculación con una red relacionada con robos.
Según han informado a Efe fuentes conocedoras de la operación, el párroco fue detenido el viernes, como hoy avanza el diario La Verdad de Albacete, y quedó en libertad ayer.
Estas fuentes han apuntado que los investigadores sospecharon que el sacerdote podría ocupar ‘un pequeño punto’ en una amplia operación contra una red de delincuentes y por eso se procedió a su arresto.
Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la región han confirmado a Efe que el párroco pasó a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Albacete, que decretó el secreto de sumario sobre la causa, por lo que ni siquiera han confirmado su puesta en libertad.
Sin embargo, el alcalde de Alatoz, José Luis Carboneras, ha asegurado a Efe que el párroco está en su casa y ha planteado que su detención podría deberse a ‘un error’ relacionado con unas fotos tomadas durante un bautizo que ofició el párroco.
Como cuenta La Verdad, la detención de este cura también ha sorprendido de forma desagradable al obispo de la diócesis de Albacete, Ciriaco Benavente, que está dispuesto a colaborar con la Justicia para aclarar este caso. «Esto me duele profundamente y lo lamento porque estas cosas, aunque después queden reducidas a nada, provocan el escándalo enseguida», declaró monseñor Benavente. El cura objeto de la polémica regresó a su vivienda de Carcelén tras recobrar la libertad y, según el alcalde de Alatoz, parece estar interesado en aclarar el asunto a sus feligreses, que desde el pasado fin de semana han contado con un cura suplente enviado por el Obispado para las misas en estas dos parroquias.
(RD/Efe)